Prueba definitiva para Márquez este domingo en Portimao

Tras anunciar este viernes que está recuperado de la lesión ocular derivada del accidente que sufrió practicando motocross el 30 de octubre, Marc Márquez explicó que necesitaba confirmar que está listo para volver a subirse a una MotoGP probándose en un circuito de gran premio.

Tres meses después de su accidente, Marc tomó palabra en una rueda de prensa virtual para dar la mejor noticia que los aficionados podrían esperar: la recuperación de su diplopía (visión doble) está llegando a su fin y el piloto no requiere ninguna cirugía.

Se pusieron sobre la mesa circuitos como el de Barcelona en Montmeló, el de Cheste en Valencia o el de Jerez para iniciar esta nueva toma de contacto en la que el #93 buscaría recuperar soltura y complicidad sobre una moto deportiva. Sin embargo, el trazado elegido por Honda y el piloto ha sido el Autódromo de Portimao en el Algarve, en el sur de Portugal, justo donde reapareció el pasado año tras la larga lesión en el hombro. 

El objetivo de las pruebas es comprobar si Marc está ya listo para tomar parte de los primeros entrenamientos de pretemporada, el 5 y 6 de febrero en Sepang.

Márquez rodará durante este domingo en Portimao con la RC213V-S, una moto deportiva preparada en la que ya hemos podido ver a su compañero de equipo Pol Espargaró. Esta moto se trata de la versión de Honda más parecida a una MotoGP, con la que podrá poner a prueba la estabilidad de su visión a máxima velocidad y máximo esfuerzo.

Además, el próximo 8 de febrero Márquez, que reveló que existió una opción real de tener que dejar de correr, estará junto a Espargaró en la presentación del Repsol Honda para la temporada 2022 de MotoGP.

El piloto de Cervera ha compartido en sus redes sociales un selfie rumbo a Portimao junto a su hermano Alex Márquez que podría confirmar un posible entrenamiento conjunto.