El Inside Ducati revela la charla entre Stoner y Márquez criticando las nuevas 'ayudas'

Como cada semana, Ducati ha publicado su esperado Inside, el vídeo con las mejores imágenes del fin de semana desde dentro del box. Y el capítulo del Gran Premio de Austria dejó de todo: un Marc Márquez imparable con su sexto doblete consecutivo, un Pecco Bagnaia frustrado tras otro mal resultado y una visita muy especial, la de Casey Stoner, que protagonizó una conversación memorable con el piloto del momento.

Stoner y Márquez, dos viejas escuelas frente a frente

El australiano, bicampeón de MotoGP y mito de Ducati, apareció en el paddock de Spielberg y no dudó en bromear con Márquez: "No está mal, eh?", le dijo entre risas, en referencia a su dominio y a la racha de dobletes. Marc contestó, también entre carcajadas: "Sí… voy más suave".

La charla subió de tono cuando Márquez reveló a Stoner la nueva ayuda electrónica de control de estabilidad, estrenada ese fin de semana: "Sí, ahora puedes estar con la moto completamente inclinada y con el device trasero haces pam, y no pasa nada".

Stoner, incrédulo, negó con la cabeza: "Creo que es difícil para las próximas generaciones. Tú eres de la vieja escuela, sabes pilotar sin ayudas. Pero ahora no saben anticiparse al derrape". Márquez asentía: "Sí, total, aunque en ‘time attack’ son rapidísimos porque tienen muchísima confianza".

El mismo debate lo mantuvo con Bagnaia, que confesó: "Lo probé en Aragón y es más fácil". A lo que Stoner, tajante, le respondió: "Totalmente, esto es lo que no me gusta, lo que intento combatir".

Pecco se hunde, Marc vuela

El vídeo también reflejó los contrastes del fin de semana. El viernes se vio a un Bagnaia optimista tras la qualy, donde fue tercero por delante de Márquez, y a un Marc analizando con sus ingenieros cómo mejorar el sector 3. Incluso hubo tiempo para cantar en el hospitality durante el Ferragosto, con Márquez entonando un "Sarà perché ti amo" que animó a todo el equipo.

Pero la realidad en pista fue otra. Pecco se retiró en la Sprint entre gestos de frustración: "Después de cinco vueltas, la rueda trasera estaba muerta, no tenía control", explicaba abatido. Márquez, en cambio, se llevaba la 12ª de 13 sprints del año.

El domingo, el guion se repitió: Marc analizó la carrera, advirtió con humor sobre el rookie Fermín Aldeguer —"Es un rookie, aún no sabe lo que hace la moto… Fermín, cuidado"— y acabó celebrando otra victoria histórica: "He ganado aquí eh… después de tres años ganándome vosotros, ahora tengo yo la Ducati también", le dijo eufórico a Gigi Dall’Igna.

El Inside se cerró como siempre: un Bagnaia cabizbajo, sin respuestas, y un Márquez celebrando con mecánicos, ingenieros y hasta con el box de Gresini, que también brindó por Aldeguer.