Forcada: “Viñales no lleva la Yamaha como le gustaría, pero saca lo mejor de ella”
Ramón Forcada, jefe de mecánicos de Maverick Viñales, se deshace en elogios hacia el español, de quien asegura que a pesar del dominio demostrado hasta ahora todavía tiene margen de mejora.
Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images
Austin.- A lo largo de su trayectoria en el paddock, Forcada ha trabajado con infinidad de pilotos distintos. Tantos, que ni siquiera ha hecho la cuenta de todos ellos.
Después de nueve años dirigiendo el lado del box de Yamaha de Jorge Lorenzo, el ingeniero trabaja ahora con Viñales, que se ha adaptado de forma inmejorable a la M1. Prueba de ello es el pleno de victorias logrado en Qatar y en Argentina, pero también la velocidad exhibida a lo largo de toda la pretemporada.
Y eso que, según explica Forcada en esta charla con Motorsport.com, el piloto español ha tenido que variar su estilo de conducción para adaptarlo a un prototipo algo distinto a su ideal.
“A Maverick le gustaría disponer de una moto que tuviera la maniobrabilidad y la tracción de la Yamaha; que girara como la Honda y que corriera como la Ducati. Pero a todos los demás pilotos, también. Y como él sabe que eso es imposible, pues no conduce de la forma en la que él se siente más a gusto, sino que trata de sacar el máximo partido a lo que le puede ofrecer la Yamaha”, esgrime el técnico de Moyá (Barcelona).
“A él le gustaría poder frenar muy tarde y muy fuerte, entrar muy rápido y girar como lo haría con una Honda. Pero es consciente de que con esta moto eso no puede ser, de modo que tiene que imitar un poco lo que hacía Jorge”, relata Forcada.
“Ahora se le ve más paso por curva que cuando estaba en Suzuki. La Yamaha está hecha para sacar provecho de eso: tiene mucha estabilidad detrás y permite salir de los virajes con mucha tracción. No es que a él le guste, sino que esta moto es así”, añade.
Según el responsable del taller del #25, es verdad que el corredor de Roses (Girona) ha encontrado en la M1 una moto muy equilibrada, pero eso no significa que ya lo tenga todo por la mano.
“Tiene que mejorar la salida, pero eso es cuestión de tiempo. Y en la cronometrada, acostumbrarse a hacer el tiempo en la primera vuelta, no tanto en la segunda. Si lo haces los sábados por norma, te habitúas a hacerlo también los domingos, y si arrancas medianamente bien te ahorras problemas. En MotoGP, si te encantas te pasan cinco antes de la primera curva, y si tu objetivo es ganar se te complica la cosa”, zanja Forcada.
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