Dovizioso: “Antes pensaba que era imposible poder medirme con Márquez”
Andrea Dovizioso no da crédito al nivel de competitividad al que ha llegado en este 2017 y alucina por cómo le ha cambiado la perspectiva desde el triunfo logrado hace un año en Sepang.
Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images
Por aquel entonces, Ducati ya había anunciado la contratación de Jorge Lorenzo como el encargado de capitanear el proyecto que debía devolver el título de pilotos a la marca de Borgo Panigale una década después de la coronación de Casey Stoner.
Hasta ese Gran Premio de Malasia de 2016, Dovizioso solo había ganado una carrera en MotoGP, siete años antes (2009), bajo la lluvia de Donington Park.
En Sepang, el curso pasado, nada más bajarse de la moto, el italiano reconoció haberse pasado la última vuelta llorando, contagiado al ver a su novia a unos amigos, situados en la primera curva del circuito.
Doce meses después de aquella victoria, Dovizioso es otro profesionalmente hablando, y ya nada tiene que ver con aquel corredor al que todo el paddock veía como un secundario de los buenos.
Sus seis victorias y el hecho de haberse convertido en el estilete de Ducati y en el rival directo de Marc Márquez en la gresca por el título es algo que incluso al propio Dovi le genera vértigo, por más que sea perfectamente cómo lo ha hecho.
“Estoy disfrutando como un loco. Marc irrumpió en MotoGP en un momento complicado de mi carrera. Lo veía y pensaba que era imposible que algún día pudiera medirme con él como lo estoy haciendo ahora”, describe Dovizioso, siempre clarividente en sus reflexiones.
“Eso me ha hecho ver que todos tenemos una cabeza limitada. Resulta que llegas al que crees que es tu máximo nivel y ves muros aquí y allí, pero luego te das cuenta de que hay formas de derribar esos muros. Este proceso por el que estoy pasando es una experiencia de vida brutal”, argumenta el ducatista, uno de los integrantes de la parrilla que más piensa encima de la moto.
Esta vez lo volvió a hacer en Malasia, en el último giro, mientras vigilaba que a Lorenzo no le diera por atacar. “En la última vuelta pensé en cómo estaba el año pasado y lo que significó para mí esa victoria en ese momento, y en cómo estoy ahora, cuando la sexta victoria de la temporada aún no me deja del todo satisfecho”, zanja Dovizioso, que se presentará en Valencia, última parada del calendario, 21 puntos por detrás de Márquez.
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