La peor clasificación de Dovizioso le separa un poco más de Ducati

Para el italiano, el tríptico de carreras de agosto, con la cita de este fin de semana en Brno y las dos siguientes en el Red Bull Ring austríaco, donde solo ha ganado Ducati desde que MotoGP regresó al trazado de Spielberg, eran claves para deshacer el nudo de su renovación con la marca de Borgo Panigale.

A la espera de un resurgimiento el domingo en carrera, la carta de presentación de Andrea Dovizioso en la República Checa no ha podido ser peor este sábado, clasificando 18º en parrilla tras no pasar de la Q1, su peor dato en este tipo de suertes desde que pisa el box con la moqueta roja.

Hasta ahora, su peor posición en parrilla había sido un 15º puesto en el Gran Premio de Holanda de 2013 (5º en la Q1), que solo mejoró hasta la 10ª posición en la carrera de aquel año en Assen.

La introducción de un neumático trasero de nueva construcción por parte de Michelin, ha dejado totalmente desorientado al corredor de Forli esta temporada, pasando por grandes dificultades.

“Es toda la maniobra lo que no soy capaz de hacer. En moto, cuando no puedes hacer la primera cosa, todo lo que viene después se hace más difícil. Ya en la frenada hemos tenido que hacer una modificación, y en la última parte, cuando dejas ir los frenos y debes hacer girar la moto, el neumático se va con mucha facilidad y, por tanto, te hace fallar”, trató de explicar.

“Si te fijas en la Yamaha o la Suzuki, son los que menos se mueven en el centro de la curva, son las motos que más las pueden hacer correr, porque son fuertes en ese aspecto, tienen un moto más dulce”.

“La Ducati, en cambio, apenas tocamos el gas perdemos el agarre, nada. Si logras hacer correr la moto sin perder agarre tienes una buena ventaja. Este es un aspecto, pero nuestro problemas empiezan antes, al inicio de la frenada”, dibuja un panorama apocalíptico.

Además de dejar escapar una gran oportunidad para recuperar el mando en la renovación con Ducati, el italiano lleva tres años acabando segundo del Mundial por detrás de Marc Márquez, y ahora que el catalán está lesionado no parece poder sacar partido.

“Entiendo este tipo de razonamiento, pero el piloto no lo vive así. No es que esperes que pase algo para tener más posibilidades: seguro, sin Marc en la pista todo el mundo tiene más posibilidades, pero cada año tiene su historia y siempre es así en el mundo del motorsport”, razonó.

Sin embargo, una Ducati de 2019, la del francés Johann Zarco del equipo Avintia, logró la pole.

“Sobre el papel, siempre hay mucho razonamiento, pero siempre hay tantos factores que influyen en lo que sucede. Todos esperábamos llegar aquí y encontrarnos con las Ducati al frente, pero no es así. Zarco hizo un tiempo exagerado, pero quiero ver qué ritmo tendrá mañana en la carrera. Nadie esperaba que los neumáticos cayeran de esta forma tan exagerada en este circuito”.

El problema para Dovi, más allá de la renovación o de perder la gran oportunidad ante la baja de Márquez, es que no está disfrutando del pilotaje.

“Ese es el punto, poder conducir bien. Si no puedes hacer todo lo que sabes que puedes hacer, no es divertido. Y cuando no es divertido, se vuelve realmente complicado a estos niveles. No sabemos cómo manejar este neumático y eso es lo que está pasando”.

Evidentemente, no sumar un buen saco de puntos en estas tres carreras pueden cerrarle la puerta de la continuidad en Ducati, además de tensar un poco más unas relaciones dentro del box que no parecen atravesar el mejor momento.

“No sé, somos humanos así que todo afecta. Sabes muy bien, sin embargo, que en este momento es mejor que no conteste sobre estas cosas”, despejó balones fuera el de Forli que, sin embargo, sabe perfectamente que Ducati está mirando en todas direcciones en busca de un sustituto, y que un futuro en común es cada vez más complicado.

El fin de semana de Andrea Dovizioso en Brno

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