Dall'Igna apunta a un exceso de entusiasmo de Martín en Mandalika

El Gran Premio de Indonesia del pasado fin de semana fue un punto de inflexión en el Mundial de MotoGP. Aunque también puede serlo el próximo GP de Australia, o el que ya se disputó en Montmeló, cuando Pecco Bagnaia, hasta entonces sólido líder de esta campaña, sufrió un accidente y dejó la puerta abierta para que Jorge Martín se acercara en la general.

Desde entonces, el español ofreció un rendimiento perfecto, sumando casi todos los puntos en juego en cada fin de semana, mientras el italiano luchaba por reencontrar su eficacia. Pero la caída de Martín mientras rodaba en cabeza de carrera de Mandalika y la victoria de Bagnaia, que volvió a sacar la mejor versión de sí mismo, sugieren que la fase de inestabilidad vivida por el #1 desde Barcelona puede haber llegado a su fin.

Haciendo balance, Gigi Dall'Igna, director general de Ducati Corse, describió a la de Indonesia como "una carrera vivida al filo de la navaja, en la que siempre era posible un giro del destino, más aún teniendo en cuenta el fin de semana en su conjunto". Y alabó la actuación de un "formidable" Pecco Bagnaia, que logró una "victoria impresionante [...] en el momento más importante de la temporada". El ingeniero consideró su éxito como "una señal fuerte" después de un fin de semana en el que fue 13º en parrilla, y en el que vio cómo su rival más cercano se hacía con el liderato del campeonato el sábado.

Después de dos meses sin ganar una carrera larga, desde Austria, Bagnaia se encontraba entre la espada y la pared y tenía que reaccionar, y lo hizo con una victoria meticulosamente construida. "Una auténtica obra maestra después de lo sucedido en la clasificación y en la carrera al sprint. Un brillante ejemplo de la reacción y la determinación de un verdadero campeón, que demostró inmediatamente que estaba preparado cuando las circunstancias se pusieron a su favor".

"Después de haber ganado la sprint, Jorge dominaba también el Gran Premio con una autoridad implacable, sólo traicionada por un exceso de celo [por entusiasmo]", añadió Gigi para describir la caída del piloto del Pramac Racing, que había acumulado una ventaja de tres segundos en el ecuador de la carrera larga, rodando a un ritmo endiablado.

Al hilo de su caída, el de San Sebastián de los Reyes admitió su error, pero se defendió y descartó la idea de que su neumático delantero, el blando, no hubiera soportado el esfuerzo al que había sido sometido. Explicó que simplemente se había desviado en la trayectoria de la curva anterior y que entonces había quedado a merced del compuesto sucio. Dall'Igna apuntó, sin embargo, al nivel de Pecco.

"Bagnaia simplemente [hizo] su carrera", prosiguió. "Con orgullo y sin perder nunca la esperanza: eso es lo que le permitió volver a la victoria. Su espléndida carrera y su actitud ganadora nos levantaron el ánimo. Con tenacidad y talento, hizo una remontada en seco que no se veía desde hace años [desde la victoria de Marco Melandri en Turquía 2006], un éxito impresionante que marca la diferencia y le lleva de nuevo a lo más alto del campeonato".

"Quedan cinco carreras para el final de la temporada: va a ser muy duro. Lo que ha sucedido en las últimas carreras, incluida ésta, muestra la incertidumbre de un desafío que está totalmente centrado en Ducati y que promete ser emocionante y totalmente dedicado a la deportividad. Estamos orgullosos de todo esto", finalizó Gigi.