Vidales, cuatro años en el podio del mundial de karting: "No está tan mal"

El joven piloto leonés de 17 años cuenta casi todas sus participaciones en un mundial de karting por podios (a excepción del de la categoría OK en 2018) y el de este año tiene especial valor, ya que solo se ha subido en el kart en cuatro citas esta temporada. 

El pasado fin de semana sumó su cuarto top 3 en un mundial en cuatro años y en tres categorías diferentes (OK junior, OK y KZ2).  

Después de una mala arrancada en la salida de la final del domingo, Vidales remontó desde la sexta posición hasta el segundo puesto final, a solo siete décimas del vencedor, el francés Emilien Denner.

“Desde dentro también fue intensa. Fue un fin de semana intenso. En las cronometradas hicimos quintos de la general de 126 pilotos y luego en las clasificatorias gané tres, en otra tercero, dos segundos… el ritmo era muy bueno, pero nunca tan bueno como el del francés que ganó, siempre nos faltaba una decimilla", reconoce Vidales a Motorsport.com.

"Cuando salí en la final tercero iba con la idea de intentar en las primeras vueltas ponerme en cabeza e intentar que no se me escapara Denner, porque si luego cogía un poco de margen, tal y como habían ido las clasificatorias, pensaba que no podría recuperar si perdía algo de tiempo".

"Salí mal porque me equivoqué en la salida, me quedé 6º e intenté recuperar como pude. En las primeras vueltas, nada más que encontraba un hueco, me tiraba a por los de delante en cada curva. Estaba intentando darlo todo al principio para que no se me escapara mucho. Con Pollini perdí mucho tiempo y cogió mucho espacio".

Pero Vidales se sacó de la chistera un ritmo por vuelta imparable desde que se colocó segundo, en el 13º giro. Con 12 vueltas por delante, tiró con todo, recortando poco a poco la distancia con el que había sido el mejor piloto del fin de semana hasta el momento y cruzó la meta a solo siete décimas. 

"El ritmo fue buenísimo, porque lo tenía a dos segundos y llegué a quedar a siete décimas. No me lo esperaba. Si hubiera sabido que tenia ese ritmo, hubiera enfocado al carrera de otra manera, no empezando tan agresivo. Fue así, en ese momento no puedes saber cómo vas a ir dentro de 20 vueltas, te da un poco de rabia, porque el ritmo era para meterle media pista si salían las cosas bien, pero bueno...".

Vidales reconoce que ahora, una vez bajada la adrenalina y reflexionado tranquilamente en casa, el logro de estar en cuatro podios del mundial de tres categorías diferentes en los últimos cuatro años (desde que tiene 13) no está al alcance de cualquiera. 

"Con el resultado no estaba contento, estaba bastante enfadado, pero después lo piensas y mirándolo desde otro lado… cuatro años consecutivos y en todos los mundiales que he corrido he estado en el podio, menos el del año pasado de OK, que salía segundo y no acabé en el podio. Pero dices 'tampoco está tan mal'. Aunque siempre quieras ganar y tengas aún esa espinilla clavada de estar siempre ahí pero nunca llegar a conseguirlo, no es fácil la constancia que hay que tener, además en categorías siempre diferentes". 

El siguiente paso son los monoplazas, en los que este año estuvo a punto de competir con el equipo FA Racing de Fernando Alonso, que milita en la Fórmula Renault.

“Fernando [Alonso] me había dicho que este año iba a subir a monoplazas y por eso también no hice muchas carreras de karting, solo las que no coincidían con ninguna de fórmulas. Cuando empezó con el equipo de Fórmula Renault no hice las primeras carreras, pero la idea era entrar luego con el cuarto coche. Pero viendo los resultados del equipo y que teniendo un piloto con bastante experiencia tampoco fuera bien, Fernando dijo que lo mejor era no subirme ahí, porque en el primer año de fórmulas estar último... que las cosas era mejor hacerlas bien", cuenta Vidales. 

El bicampeón del mundo de F1 y campeón del mundo de resistencia 2018/19 apadrina al joven leonés y Vidales reconoce que tenerle al lado es todo un orgullo y un aprendizaje continuo, incluso cuando salen a rodar en bicicleta juntos. 

"La relación es buenísima. Fernando sabe muchísimo y me ha dado consejos, sobre todo cuando hice el test en el F3 el año pasado en Barcelona. Al final, yo lo único que puedo hacer es escucharle y todo lo que me dice intentar ponerlo en práctica después", admite. "Cuando estoy en León solemos entrenar juntos tanto en bici como con el kart".