Las cinco mejores carreras de la IndyCar en 2024

La bandera a cuadros ondea en 2024, lo que significa que es hora de echar la vista atrás a las mejores carreras de la IndyCar de la temporada pasada.

Hubo mucho donde elegir después de una campaña llena de acontecimientos, pero los eventos elegidos para los cinco primeros puestos se redujeron a varios factores: la calidad de las carreras, el final, una actuación destacada, los adelantamientos, y luego simplemente la intensidad.

Menciones honoríficas: Toronto, Gateway

Las calles de Toronto eran el mejor escenario para que Colton Herta rompiera una racha de 40 carreras sin ganar que se remontaba a 2022. Pero aunque lideró 81 de las 85 vueltas iniciales tras salir desde la pole, en los últimos compases su compañero de equipo en Andretti Global, Kyle Kirkwood, recortó distancias y puso en apuros el doblete del equipo frente al Honda del Chip Ganassi Racing de Scott Dixon. Herta terminó sólo 0.3469s por delante de Kirkwood, con Dixon 0.9680s por detrás.

Pero en Gateway hubo un poco de todo. Aunque hubo 21 cambios de liderato entre 11 pilotos y un total de 676 adelantamientos, también hubo muchos accidentes con seis periodos de "caution" que abarcaron 49 de las 260 vueltas.

El recuerdo dejó un sabor amargo para muchos después de un polémico reinicio tardío por parte de Josef Newgarden, del equipo Penske, que en última instancia fue muy agresivo y molestó a varios pilotos, incluido su compañero de equipo Will Power, que le hizo una peineta.

Newgarden ganó finalmente esa carrera.

Foto de: Phillip Abbott / Motorsport Images

5. Mid-Ohio

El debut sin precedentes del híbrido atrajo mucha atención al inicio del fin de semana, pero fue la lucha por la victoria lo que atrajo la atención de todo el mundo. Una vez ondeó la bandera verde, la carrera parecía abocada a un dominio total del poleman Alex Palou, que abrió una ventaja de unos 8s.

Pato O'Ward, con el Arrow McLaren, se acercó poco a poco al piloto del Chip Ganassi Racing, hasta que en la vuelta 56 de 80 se produjo algo inesperado. Palou tuvo un problema en boxes y fue todo lo que O'Ward necesitó para realizar un adelantamiento por el exterior y ponerse en cabeza cuando se encontraron en la curva 1.

El español continuó acechando a O'Ward. En las últimas vueltas, los dos se encontraron con pilotos doblados, lo que permitió a Palou acercarse todavía más, pero el mexicano aguantó la presión y finalmente O'Ward cruzó la línea de meta con 0.4993s de ventaja sobre Palou.

4. Milwaukee 2

Este puesto podría haber sido para cualquiera de las dos carreras del fin de semana doble en el regreso de la IndyCar a The Milwaukee Mile. Lo que puso a la edición nocturna por delante de la carrera de apertura fue, simplemente, lo salvaje que fue hasta el final.

El dominio de Palou en el campeonato pareció aflojar cuando un problema eléctrico le impidió empezar la carrera con la bandera verde. El español se quedó detrás del muro durante las primeras 29 vueltas, pero finalmente salió y progresó en el orden clasificatorio mientras el caos se apoderaba de otros pilotos, entre ellos Power, que hizo un trompo y perdió la oportunidad de maximizar sus puntos.

Una reanudación a sólo 12 vueltas para el final creó un gran final, con Scott McLaughlin defendiéndose de un Dixon que venía a la carga para conseguir su segunda victoria en un óvalo y la tercera de la temporada por sólo 0.4558s. En la carrera hubo 13 cambios de liderato entre siete pilotos diferentes, y 177 de los 763 adelantamientos totales fueron por posición real en pista.

3. Long Beach

Por fin, un fin de semana en el que Dixon no fue el único que se puso en cabeza. El espectador casual podría mirar la hoja de estadísticas y ver seis cambios de liderato entre ocho pilotos y preguntarse por qué está en esta lista. Pero también hay que destacar lo que fue una clase magistral de estrategia, ahorro de combustible y defensa en la que Dixon, seis veces campeón de la IndyCar, hizo una de las mejores actuaciones de su carrera.

Una temprana bandera amarilla en la vuelta 15 permitió al neozelandés entrar en boxes dos vueltas más tarde cuando estaba en la séptima posición, una decisión por la que también optó el líder de la carrera, Power. A modo de comparación, los demás también llevaron a cabo una estrategia de dos paradas, aunque hicieron sus primeras paradas entre las vueltas 29 y 32. Dixon fue finalmente el único que lo logró, ya que el ritmo de Power se vino abajo en un esfuerzo por ahorrar combustible y terminó sexto.

Mientras tanto, Dixon luchó por defender la primera posición, frenando en las curvas y atacando para mantener a Herta por detrás. Dixon necesitó hasta el último gramo para extraerlo todo en un stint mágico de 34 vueltas que le llevó a su 57ª victoria en la categoría.

2. Nashville

Sí, el final del campeonato fue un poco anticlimático después de que una extraña avería en el cinturón de seguridad obligara a Power a entrar en boxes sólo 12 vueltas después del inicio de la carrera y le diera a Palou su segundo título consecutivo. Sin embargo, a pesar de todo el alboroto que hubo en la transición de la carrera de las calles del centro de la ciudad al Nashville Superspeedway, fue un gran espectáculo.

La imprevisibilidad de un regreso tan esperado al óvalo y unas combinaciones únicas de neumáticos de múltiples opciones convirtieron esta carrera en una grata sorpresa. La carrera de 206 vueltas sólo se vio interrumpida por tres banderas amarillas, con 653 adelantamientos totales (237 por posición en pista).

En un momento dado, parecía que Kirkwood iba a ganar, luego David Malukas al volante de un Meyer Shank Racing Honda y más tarde parecía que iba a ser O'Ward.

En las últimas vueltas, O'Ward y Herta se enzarzaron en una lucha por el primer puesto mientras ambos se separaban del tráfico. Al final, fue Herta quien puso el punto de exclamación a su resurgente temporada, ya que logró su primera victoria en un óvalo y en ese momento eso le permitió subir al segundo puesto de la clasificación de pilotos tras el inoportuno problema de Power con el cinturón de seguridad.

1. Indy 500

La madre naturaleza se encargó de estropear el día principal, pero una vez que los 33 pilotos salieron de la parrilla no hubo más que fuegos artificiales. Kyle Larson, campeón de la NASCAR Cup en 2021, debutó en la Indy 500 gracias a un esfuerzo conjunto con Arrow McLaren y Hendrick Motorsports, e incluso con algunos problemas de aprendizaje, fue tan rápido como se esperaba.

Si los 48 cambios de liderato entre 16 pilotos diferentes no fueran suficientes, hubo 596 adelantamientos por posición. Sin embargo, nada podía preparar a los espectadores para uno de los mejores finales en una carrera de más de un siglo de antigüedad, cuando Newgarden y O'Ward se enfrentaron en las últimas vueltas. O'Ward adelantó al piloto de Tennessee a cinco vueltas del final, pero Newgarden le devolvió el favor en la vuelta siguiente.

En lugar de devolverle el golpe inmediatamente, O'Ward acechó a Newgarden antes de adelantarle por el exterior en la recta de meta cuando los dos vieron la bandera blanca.

O'Ward lideró en la curva 1 y luego trató de romper el rebufo que Newgarden quería conseguir al salir de la curva 2, pero el piloto de Penske optó por mantener su línea de carrera y se acercó a O'Ward.

Newgarden logró ponerse al lado de su rival e hizo un atrevido adelantamiento por el exterior en la curva 3, acercándose al carril interior con ímpetu mientras empujaba al joven mexicano, que entonces perdió todo el aire de su alerón delantero y se fue casi contra el muro.

Newgarden se hizo con la victoria y se convirtió en el primer piloto en ganar de forma consecutiva "el mayor espectáculo de las carreras" desde que lo hiciera Helio Castroneves en 2001 y 2002.