11 años sin María de Villota, siempre presente

Tal día como hoy, un 11 de octubre de 2013, María de Villota fallecía en un hotel de Sevilla a los 33 años, en una jornada en la que se encontraba reposando a la espera de presentar su libro "La vida es un regalo", cuya presentación estaba programada para la mañana siguiente.

Las secuelas sufridas en un terrible accidente en el Aeródromo británico de Duxford, mientras hacía un test al volante de un Fórmula 1 junto al equipo Manor, desencadenaron su muerte más de un año después.

Dicha prueba aerodinámica tuvo lugar el 3 de julio de 2012, con un Manor MR-01. Durante ese test, que básicamente se simplificaba a rodar en línea recta para estudiar la aerodinámica del monoplaza a alta velocidad, la española tuvo la mala fortuna de impactar contra una rampa de un camión que estaba a medio subir, en extrañas circunstancias, sufriendo el primer impacto en el casco y, por ende, en su cabeza.

María De Villota sufrió graves lesiones y perdió el ojo derecho en ese terrible accidente sufrido al este de Inglaterra. Pese a no morir en el impacto, las secuelas para la piloto sevillana fueron lo suficientemente graves como para perder la vida unos meses después.

A día de hoy, 11 de octubre de 2024, su legado sigue presente en cualquier rincón del mundo del motor y, sobre todo, entre todos los españoles que participan en la Fórmula 1 y demás categorías automovilísticas.

María de Villota nació el 13 de enero de 1979 en Sevilla, hija del expiloto de la máxima categoría del automovilismo, Emilio de Villota. Al contrario que todo/as lo/as pilotos, sus inicios en el mundo del deporte de motor fueron muy tardíos, ya que no fue hasta los 16 años cuando despertó su apetito por el Motorsport, participando en algunos campeonatos de Karting en los que tuvo bastante éxito, empezando a acumular un gran interés.

Comenzó a competir al volante de algunos fórmulas nacionales, es decir, monoplazas, antes de dar un paso al lado y adentrarse en el mundo de los turismos y las carreras de resistencia, compitiendo, entre otras, en las 24 Horas de Daytona de 2005, carrera que terminó en la 24ª posición.

Su andadura en la Fórmula 1 arrancó en 2011, como colaboradora del equipo Renault, realizando incluso un test con un R29 de la temporada 2009. En 2012, con 32 años, de Villota fichó por la escudería Manor como piloto de pruebas. Unos pocos meses después, tuvo lugar el terrible accidente que más tarde acabaría con su vida.

Allí donde estés, te recordamos. Tu legado será eterno, como tú, María de Villota.