Vergne recupera el sueño con su victoria en Sanya

Vergne superó al poleman Oliver Rowland en Sanya con un adelantamiento valiente en la última curva de la vuelta 19 de 36, en un movimiento que acabaría decidiendo la carrera.

La victoria en del piloto del DS Techeetah fue su primera de la temporada 2018/19 y llegó después de que Vergne pidiera el fin de la "espiral negativa" que le alejaba del triunfo carrera sí y carrera también en los últimos meses.

La victoria de Vergne también fue la primera para Techeetah, ya que se unió a DS para convertirse en equipo oficial antes de la temporada 2018/19.

"Es nuestra primera victoria y nuestro nuevo equipo, DS Techeetah y yo, nos sentimos muy orgullosos y felices de poder dar esta victoria a DS", dijo Vergne.

"Es una nueva relación, siempre es difícil cuando empiezas. Pero llevaba 20 carreras seguidas en los puntos y fue muy duro para mí no puntuar en el anterior ePrix".

"No dormí muy bien entre Hong Kong y aquí".

"Pero aunque sufrimos, pudimos mantenernos unidos como equipo y seguir trabajando con el mismo deseo de avanzar y de hacer el mejor trabajo posible ha dado sus frutos".

"No puedo estar más feliz con el trabajo que hemos hecho. Y además es un gran día para nosotros, somos un equipo chino y ganar aquí fue absolutamente increíble".

"En el podio sonó el himno chino y todos los aficionados lo cantaban. En realidad fue bastante emotivo".

Vergne cree que su adelantamiento crucial para ganar la carrera salió bien porque sorprendió a Rowland.

El piloto de Techeetah estaba ahorrando batería en su persecución a Rowland, lo que le valió una ventaja energética.

"Él [Rowland] es un hombre difícil de adelantar. Se mueve un poco, a veces demasiado, pero eso son carreras y se puede jugar dentro de las reglas", dijo Vergne.

"Vi que solo había una curva en la que podía adelantarle. Traté de atacarle en muchas otras, pero no en esa. Y en cada vuelta que yo levantaba demasiado pronto él veía que nunca estaba cerca de él".

"En realidad, Daniel [Abt] intentó pasarme en esa curva y, cuando llegó el momento, fui por él [Rowland]".

"Creo que le sorprendí. Probablemente era la única curva en la que no estaba mirando en su espejo porque sabía que siempre estaba levantando muy pronto en todas las vueltas anteriores".