Bird lamenta el trazado donde se juega el título de Fórmula E

Jean-Eric Vergne, de Techeetah, llega al último fin de semana de la temporada de Fórmula E líder, con 23 puntos de ventaja sobre Sam Bird, de Virgin.

El ePrix de Nueva York que cierra el campeonato cuenta con dos carreras, por lo que un piloto podría llegar a sumar hasta 58 puntos haciendo el fin de semana perfecto: 50 por dos victorias (25 puntos para el ganador), 6 por dos poles (3 puntos se dan al 'poleman') y 2 por dos vueltas rápidas (el que la consigue en cada carrera recibe 1 punto).

Es decir, Bird podría hacer todo eso y aun así dependería de que su rival no fuera segundo en ambas mangas, porque en ese caso, Vergne sería el campeón (Bird sumaría 58 puntos y el francés 36, quedándose uno por delante).

Para poner en más aprietos a su rival, Bird necesitaría sumar su primera pole de la temporada (mientras que su rival ya lleva cuatro) y su tercera victoria (Vergne tiene ya tres).

Bird logró una pole y ganó las dos carreras celebradas en Nueva York la temporada pasada, la primera vez que la Fórmula E visitó la ciudad, pero el circuito de Brooklyn ha sido modificado para su segundo evento.

La pista de Fórmula E es casi medio kilómetro más larga, con cuatro nuevas curvas que se extienden desde la curva 6 y reemplazan a la horquilla revirada que anteriormente ocupaba ese lugar.

Bird, que tiene que remontar 23 puntos en dos carreras, explicó que la pista más larga se sumaría a los problemas de Virgin con la eficiencia energética y hace que el trazado se ajuste menos a su coche.

"Es un 'animal' completamente diferente", dijo Bird a Motorsport.com. "El año pasado fuimos muy competitivos, el coche se comportaba muy bien. Con gran equilibrio, la eficiencia no era tanto un problema en comparación con nuestros rivales y la longitud de la pista era mejor para nosotros".

"Los cambios no nos van a ayudar, básicamente. La pista es más larga, lo que significa que la eficiencia es la clave. Y hay algunos coches que son más eficientes que el nuestro".

"No hay forma de escapar de eso, así que tendremos que hacer todo lo posible, maximizar el potencial del monoplaza y la conducción y esperar a ver qué ocurre".

"Será una carrera muy diferente, creo que tendrá algunos matices respecto a la de Berlín [donde Audi hizo doblete, Vergne fue tercero y Bird séptimo]. Podría no ser brillante, pero aun así creo que será un espectáculo divertido".

"Pero es agradable ir a algún lugar donde tengas buenos recuerdos y veremos qué pasa al final".