Especial: el trágico vínculo entre Ratzenberger y Senna
Roland Ratzenberger murió un día antes de Ayrton Senna en Imola, pero no solo tuvo eso en común con el astro brasileño.
Roland Ratzenberger, Simtek S941
Sutton Motorsport Images
En 2014, un grupo de aficionados italianos organizó un bellísimo homenaje a Ayrton Senna en el circuito de Imola. El evento atrajo el interés de los fans y la prensa de todo el mundo, con una exposición de coches y objetos utilizados a lo largo de la carrera del piloto brasileño. Y con una emocionante peregrinación de miles de personas hasta la curva Tamburello para un momento de reflexión y un minuto de silencio justamente a la hora del accidente, algo escalofriante.
Pero el momento que más me emocionó en un fin de semana cargado de emociones ocurrió el día anterior, cuando se hizo un homenaje a Roland Ratzenberger con la presencia de los padres del piloto austríaco, Rudolf y Birgit, en una sala al lado de los boxes del circuito. Mientras la madre adoptó una postura más reservada, el padre atendió a todos con extrema simpatía.
Me dio curiosidad ver la intensidad con la que él vivía el momento de un recuerdo ciertamente doloroso. Hablamos después, y me explicó cuánto era importante para él mantener viva la memoria de su hijo. "Este trabajo mío por Roland es un trabajo triste, pero que me ha ahorrado un psiquiatra. Otras personas necesitan seguimiento después de un golpe como ese, yo no. Con mi esposa es diferente. Hasta hoy, ella tiene dificultades para lidiar con lo que ocurrió".
Rudolf Ratzenberger admitió también que, de cierta forma, el accidente fatal de Ayrton Senna al día siguiente del de Roland resultó ser fundamental para que eso ocurriera. "Nuestro Ayrton y nuestro Roland, los recordamos con tanto cariño. No parece que ya haya pasado tanto tiempo", apuntó.
No se puede negar que la sucesión de acontecimientos en el trágico fin de semana del GP de San Marino de 1994 hizo que el recuerdo de Roland Ratzenberger fuera más intenso que el de otros pilotos que alcanzaron resultados mucho mejores que el suyo en la Fórmula 1 y también murieron en la pista, como Luigi Musso, Peter Collins, Lorenzo Bandini y François Cevert, sólo por citar a algunos ganadores de carreras.
El piloto austríaco disputaba sólo su tercer fin de semana en la Fórmula 1, corriendo en el equipo Simtek, debutante y con un presupuesto modestísimo. Ratzenberger no había logrado clasificarse para el del GP de Brasil y llegó sólo en el puesto 11º en el GP del Pacífico, en el circuito japonés de Aida. Un enorme contraste con el currículo de Senna, tricampeón del mundo, corriendo en el mejor equipo de la época y uno de los deportistas más populares del planeta.
Sucedió que la interrupción brutal de sus trayectorias en el mismo momento y lugar unió a los dos pilotos. Pero no hubo sólo eso en común: Ratzenberger era sólo tres meses más joven que Senna, también zurdo y un piloto extremadamente popular en Japón. Allí sumó victorias en categorías distintas, como en resistencia, turismo y Fórmula 3000. Y con un equipo japonés venció las 24 horas de Le Mans de 1993 en la categoría C2, acabando en la quinta posición general, un resultado notable.
Cuando se salió en la curva Villeneuve, tras perder el control del coche por una rotura del alerón delantero, Ratzenberger estaba viviendo la realización del sueño que alimentaba desde niño y corría para ver los coches pasar rápidos en el circuito de Salzburgring, a pocos metros de su casa. De familia modesta, el austríaco financió la fase inicial de su carrera actuando como instructor en escuelas de pilotaje (trabajaba cinco días a la semana para correr los sábados y domingos).
Pasó por el automovilismo base de Inglaterra y logró conseguir cierta independencia financiera corriendo en Japón. Pero las puertas de la F1 solo se abrirían gracias al apoyo económico de una empresa austriaca con sede en Mónaco, donde él vivía, al igual que Senna.
En el día de la carrera, el brasileño planeaba homenajear a Ratzenberger con una victoria. "Había una bandera austríaca en el cockpit del Williams y sabíamos que Senna quería haber homenajeado a Roland. Nos dejó muy tristes que él también falleciera. Todo fue aún más amargo", me dijo el padre Rudolf en 2014.
Por Luis Fernando Ramos, Ico, que cubre la Fórmula 1 desde 1995 y vive en Austria desde 2001, habiendo cubierto el calendario completo de la categoría F1 entre 2008 y 2016.
Las fotos de Roland Ratzenberger en la F1
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