Toro Rosso está aprovechando la experiencia de Hartley con Porsche en el WEC

Hartley compitió con el Porsche 919 Hybrid LMP1 entre 2014 y 2017, proclamándose campeón del mundo del WEC en dos ocasiones y adquiriendo una gran experiencia de cómo sacar el máximo rendimiento con esa tecnología.

Aunque la tecnología actual de los motores V6 turbo híbridos de F1 y los utilizados por Porsche en el WEC son diferentes, Hartley ha aportado algunas ideas nuevas para sacar más provecho de la parte eléctrica y de la gestión del combustible y de los neumáticos.

"Lo mejor de Brendon es que tiene una visión diferente de las cosas", dijo Key a Motorsport.com. "La forma en que ahorra combustible, neumáticos y usa la energía es una aportación completamente nueva, por lo que sin duda es un punto de vista importante que no habríamos tenido si hubiésemos optado por un piloto convencional".

"Las tecnologías son lo suficientemente diferentes como para que no haya transferencia entre una y otra, pero es más el proceso y la forma en que lo miras. Creo que ha sido bueno para Honda y para todo el equipo obtener ese punto de vista fresco y único".

El propio Hartley cree que puede aportar una ventaja en términos de cómo ser más eficientes con el consumo de combustible.

"Creo que donde puede ser una ventaja es en que estoy bastante acostumbrado a tener que ser muy eficiente porque contábamos con muy poco combustible", respondió Hartley cuando Motorsport.com le preguntó qué podía aportar a Toro Rosso y Honda.

"Si llegamos a una carrera en la que estamos muy justos con el combustible, creo que es un punto fuerte. Trabajar en un proyecto de este tipo es valioso y toda experiencia es buena".

Hartley también cree que el piloto tiene menos influencia en F1 que en LMP1 debido a la poca complejidad de los sistemas híbridos. El neozelandés justifica este hecho en que el Porsche tenía tracción a las cuatro ruedas gracias al motor eléctrico que impulsaba las delanteras.

"Hay menos influencia en F1 porque no es un monoplaza con tracción a las cuatro ruedas", asegura Hartley. "Teniendo cuatro ruedas motrices, con el motor eléctrico controlando el eje delantero y el motor de combustión para la parte trasera, el piloto tenía que trabajar mucho para hacer que los dos funcionasen sin problemas".

"Hay algunas cosas que gestionar en carrera y fuera, pero en general el piloto no tiene tanto que hacer. Se hacen muchas simulaciones y hay bastante detrás de todos los equipos para que las cosas vayan bien desde el primer momento".