Cómo la situación de Alpine evidencia una crisis en la F1

En los distintos campeonatos de la Fórmula 4, una de las citas fijas al final de cada temporada es la prueba de evaluación destinada a los mejores jóvenes pilotos para iniciar su carrera en monoplazas. Muchos lo llaman el Casting, es decir, una o varias jornadas en las que se evalúa a estos pilotos tan jóvenes para saber quiénes pueden ser los grandes talentos del futuro.

La prueba privada que Alpine ha organizado para la semana que viene en Hungaroring (aún no se ha filtrado la fecha) se parece mucho a un casting de la Fórmula 4, con un grupo de pilotos llamados para ser evaluados y comparados entre ellos con vistas a ocupar el asiento que dejará libre al término de 2022 Fernando Alonso.

Sin embargo, aquí hay una gran diferencia, porque estamos hablando de un contexto muy diferente, es la Fórmula 1 y el calibre de los candidatos es obviamente diferente. Estamos hablando de un grupo de pilotos de gran renombre, que llevan años en el mundo de las carreras, cuyas características deberían ser conocidas desde hace tiempo para un equipo de F1.

Esto es sorprendente, en muchos sentidos, y difícil de interpretar por varios aspectos. El primero son los diferentes tipos de candidatos. Saldrán a la pista pilotos experimentados como Nico Hulkenberg y Antonio Giovinazzi, junto a pilotos como Nyck De Vries y otros que ni tan siquiera han debutado como Colton Herta y probablemente (su presencia no es segura) Jack Doohan.

Esta mezcla deja entrever que el equipo francés no tiene una idea clara del tipo de piloto que quiere como compañero de Esteban Ocon y, probablemente, cada uno de los candidatos está vinculado a diferentes opiniones que habrán surgido durante las discusiones de la dirección de la escudería.

Estamos halando de Alpine, un equipo oficial, con un fabricante detrás, que debería tener tomado el puslo en el paddock y, sobre todo, en el mercado. Recientemente, hablando sobre la contratación de Oscar Piastri, el director del equipo McLaren, Andreas Seidl, resumió bien una de las tareas que le corresponden: "Tenemos que conocer todos los escenarios, estar al tanto de lo que ocurre en el mercado y tener una visión clara de la situación contractual de todos los pilotos del paddock".

"Hay que estar al tanto de todo, incluso de los jóvenes pilotos que militan en la Fórmula 2 y en otras categorías. Es un proceso normal, es nuestra responsabilidad, y es lo que al final nos ha llevado a hacer el fichaje de Oscar Piastri", concluyó.

Nyck de Vries, Williams

Photo by: Williams

Un test como el organizado por Alpine puede tener sentido para evaluar a un piloto con un historial deportivo atípico como es Herta, que sólo corrió en Europa en 2016, pero por los demás, el equipo debería tener ya una idea clara.

Sin embargo, a día de hoy, varios equipos (no sólo Alpine) no tienen una sola persona que observe y evalúe a los pilotos entre sus cientos de empleados, ya sea en la Fórmula 1 o en cualquier otro lugar.

El resultado es evidente: se conocen los nombres pero no sus características, su historia, el tipo de trayectoria de crecimiento, las experiencias que ha tenido a lo largo de los años, etc. Puede parecer paradójico, pero este es el caso de la mayoría de los equipos de Fórmula 1, con algunas excepciones.

Y la mayor paradoja la veremos cuando Alpine anuncie el nombre del piloto que acompañará a Ocon en 2023. Porque en este momento, al frente de la lista de Laurent Rossi y Otmar Szafnauer, está el nombre de Pierre Gasly, que obviamente no estará en el test privado de Hungría, y que probablemente habría respondido con un "no, gracias" de haber recibido tal invitación.