La FIA investiga al GP de Australia por falta de seguridad
Los organizadores del Gran Premio de Australia 2023 de Fórmula 1 incumplieron de manera grave los protocolos de seguridad cuando los aficionados invadieron la pista al final de la carrera y son investigados por la FIA.
Algo inusual ocurrió en el final del Gran Premio de Australia 2023 de Fórmula 1, cuando el monoplaza de Nico Hulkenberg se quedó detenido tras la última vuelta de la carrera. Los comisarios investigaron lo sucedido, puesto que el alemán aparcó su Haas después de la primera curva, y en la habitual invasión de pista de los aficionados, decenas de personas se agolparon allí.
A pesar de que se vieron tres banderas rojas en la retransmisión, eso provocó una cuarta porque "un gran número de espectadores logró romper las líneas de seguridad y accedieron a la pista mientras que la carrera estaba en curso". La curiosidad y emoción por tener un monoplaza tan cerca fue algo que preocupó a la FIA, todavía más cuando el VF-23 del germano "tenía la luz roja intermitente", que quiere decir que hay un posible riesgo de descarga eléctrica.
La federación internacional consideró que los organizadores del evento infringieron el artículo 12.2.1 del Código Deportivo Internacional y solicitaron al promotor "presentar urgentemente un plan formal de reparación" al organismo rector. Los comisarios declararon que "las medidas de seguridad y los protocolos que se esperaban para la carrera no se aplicaron, lo que provocó un entorno inseguro para los espectadores, pilotos y los comisarios del circuito".
También indicaron que el asunto se remitiría al Consejo Mundial del Deporte del Motor "para una investigación más exhaustiva con el fin de determinar si es necesario tomar medidas adicionales o aplicar sanciones más allá del plan".
En la sentencia, los comisarios revelaron que los organizadores admitieron los fallos que llevaron a una "situación inaceptable" que podría haber tenido "consecuencias desastrosas". Eso llega después de que los espectadores también hicieran lo mismo en ese escenario en 2017.
La investigación tendrá en cuenta los protocolos existentes para examinar cómo se produjo la apertura de la pista y cómo los seguidores pudieron acceder al coche de Nico Hulkenberg mientras que se encontraba de manera insegura. La policía también estará en el caso, aunque el promotor ha solicitado que se le conceda hasta el 30 de junio de 2023 para llevar a cabo la investigación, algo que deberá ser aprobado por la FIA.
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