Sanciones y apelaciones en la historia de la F1 y reacción de la FIA

En la temporada 2022, Ferrari protestó contra los Red Bull tras el GP de Mónaco, buscando cambiar el resultado de la carrera. Luego, en la parte final del curso, Alpine apeló contra una sanción a Alonso en el GP de Estados Unidos.

No eran ni las primeras ni las segundas apelaciones de equipos de Fórmula 1 en la historia pero ¿ha cambiado alguna vez la FIA una sanción o castigo tras una protesta? o al contrario, ¿ha aumentado alguna vez la severidad de una sanción tras una apelación?

James Hunt, McLaren M23

¿Ha cambiado alguna vez la FIA una penalización tras una apelación?

Sí, y el asunto más reciente es el mencionado del GP de Estados Unidos 2022 de F1. Horas después de la carrera, y tras una protesta de Haas, la FIA sancionó a Alonso por pilotar con piezas sueltas en su coche, bajándole de la séptima a la decimoquinta plaza. Sin embargo, esa misma semana Alpine apeló, asegurando que la protesta de Haas había llegado fuera de plazo y la FIA, tras escuchar a todas las partes, primero rechazó la apelación de Alpine y luego la aceptó, devolviendo a Alonso su séptima plaza y sus puntos conseguidos en Austin.

Ha habido muchas apelaciones por parte de los equipos de Fórmula 1 en la historia, aunque por lo general las hacen los equipos que han sido sancionados (como en el caso de Alpine), y no los que no están de acuerdo con la sanción.

Una de las apelaciones más famosas se produjo durante la temporada de F1 de 1976, cuando James Hunt y Niki Lauda, de McLaren F1 y Ferrari respectivamente, luchaban por el campeonato.

El 1 de mayo de ese año entraron en vigor nuevas normas que regulaban la anchura de los coches y reducían la anchura permitida.

La carrera, celebrada el 2 de mayo, la ganó James Hunt, que cruzó la meta con más de 30 segundos de ventaja sobre Niki Lauda. Sin embargo, fue descalificado cuando las verificaciones posteriores determinaron que su coche era 1,5 cm más ancho de lo permitido. Eso daba la victoria a Lauda.

McLaren, considerando que la diferencia de 1,5 cm era insignificante y se debía a unos neumáticos traseros más anchos, apeló. Dos meses después de la carrera, la apelación prosperó y se le devolvió a Hunt su victoria del Gran Premio de España 1976.

En el Gran Premio de Malasia de 1999 se produjo otra polémica sanción, esta vez contra Ferrari.

Sus dos pilotos, Michael Schumacher y Eddie Irvine, fueron primero y segundo, con su rival de McLaren, Mika Hakkinen, tercero, lo que daba a Irvine una ventaja de cuatro puntos en el campeonato antes de la última carrera. Sin embargo, los comisarios encontraron una infracción en los bargeboards de los dos Ferrari, lo que llevó a la descalificación de ambos coches.

Michael Schumacher, Ferrari F399, adelanta a Mika Häkkinen, McLaren MP4-14 Mercedes.

Ferrari apeló la decisión y tuvo éxito: la descalificación fue anulada, y volvieron a ser primero y segundo. Irvine acabaría perdiendo el campeonato por dos puntos ante Hakkinen en la última carrera.

Un ejemplo más reciente data de 2019, cuando Vettel fue sancionado por reincorporarse de manera insegura a pista durante el Gran Premio de Canadá.

Sebastian Vettel, que cruzaría la meta en primera posición, recibió una penalización de cinco segundos durante la carrera, lo que le hizo caer al segundo puesto por detrás de Lewis Hamilton tras la bandera a cuadros. Ferrari apeló la investigación y aportó nuevas pruebas en forma de un análisis de Sky realizado por Karun Chandhok. Desafortunadamente para el equipo, las imágenes no cambiaron nada y la decisión se mantuvo: la FIA no aceptó la revisión de Ferrari.

El ejemplo más reciente de una sanción impuesta tras una apelación se remonta a 2020.

Cinco equipos protestaron contra el coche de Racing Point, considerando que era demasiado similar al Mercedes W10 de 2019. La apelación tuvo éxito para los equipos que protestaban, y Racing Point fue multado con 400.000 euros y 15 puntos en el campeonato, pero se le permitió mantener las piezas infractoras durante el resto de la temporada.

Al considerar que el castigo no era lo suficientemente duro, Ferrari anunció que presentaría otro recurso contra la sentencia, con el objetivo de que se impusieran aún más sanciones al equipo de Silverstone, aunque finalmente se retiró.

Racing Point también retiró su recurso contra la sentencia, diciendo que lo hacía "en el interés general del deporte".

Mientras que la protesta de Racing Point fue realizada por equipos que consideraron que un competidor tenía una parte ilegal, las protestas contra las sanciones en carrera son raras, y aún más raras cuando no son presentadas por el equipo que fue penalizado.

¿Ha endurecido alguna vez la FIA una sanción?

Uno de los pocos casos en los que se aumentó una sanción fue contra Eddie Irvine en Brasil 1994.

Irvine (que pilotaba para Jordan) y Jos Verstappen (piloto de Benetton), estaban llegando a la altura de Éric Bernard, al que iban a doblar, cuando Irvine se movió a la izquierda, forzando a Verstappen a salirse de la pista.

El holandés perdió el control del coche al pisar la hierba y volvió a la pista, golpeando a Irvine y Bernard, así como a Martin Brundle, que iba justo por delante de ellos tres. Los cuatro tuvieron que abandonar la carrera.

Irvine recibió una multa de 10.000 dólares y fue suspendido con no disputar una carrera. Jordan apeló, pero la sanción aumentó a tres carreras sin competir.

Si bien la sanción en este caso aumentó, se debió a que el equipo sancionado apeló, no a que un equipo diferente (pero involucrado de todas formas) tratara de aumentar la severidad del castigo.