Rosberg: "Las amistades no funcionan cuando se lucha por el título"

La fina línea entre la amistad y ser enemigos se cruzó en el garaje de Mercedes durante la temporada 2016 de Fórmula 1, un año lleno de tensión entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg debido a la lucha por el título mundial. La dupla de las flechas de plata había crecido en medio de un ambiente muy sano, con peleas de todo tipo en sus tiempos en el karting, incluso compartiendo categorías inferiores hasta su llegada al Gran Circo a mediados de la década de los 2000.

En el caso del alemán, se estrenó con Williams en 2006, pero el británico no tardó mucho más, y tan solo un curso después le acompañaba en la parrilla, aunque en un serio candidato al mundial, McLaren.

Por caprichos del destino, ambos acabaron en Mercedes cuando la escudería germana tenía el que posiblemente era el monoplaza más dominante de toda la historia, por lo que el único rival sobre la pista era su propio compañero.

Después de dos campañas perdiendo frente a Hamilton, Rosberg estaba decidido a cambiar la dinámica, y así fue como, en parte favorecido por los incidentes del inglés, se convirtió en campeón del mundo en el Gran Premio de Abu Dhabi, repitiendo lo que hizo su padre, Keke, 34 años después.

El momento álgido de la rivalidad llegó en España, después de su accidente en la salida en el que el mismo jefe del equipo, Toto Wolff, tuvo que intervenir para que no se repitiera. Este tenso episodio, sumado a los del resto de la temporada, provocaron que el alemán decidiera retirarse cuando conquistó el campeonato para pasar más tiempo con su familia.

Ahora, años después, cuando se le preguntó por su relación con Hamilton, el alemán no esconde lo que ocurrió, ya que pasaron de tener una bonita amistad forjada en los circuitos a ser enemigos: "No es algo que viniera de antes, sucedió mientras peleábamos por el título".

"Desafortunadamente, así son las cosas, las amistades no funcionan cuando luchas por la victoria en cada carrera o por el mundial", reconoció a Eurosport.de, antes de que cuestionarse cuándo fue el momento en el que se rompió la relación.

"Se acumuló en cada fin de semana, si quieres ser un campeón, no puedes jugar. Tienes que probar los límites y entrar en áreas grises para vencer, sobre todo cuando ambos pilotos están a tan alto nivel", dijo Rosberg.

"Con el tiempo, empiezas a deambular por esas zonas en todo momento", reconoció el germano. "No me arrepiento de nada, fue una época sensacional y tuvimos una gran pelea".

"Estoy muy orgulloso de eso, pero ahora tenemos una relación más neutral, lo que está bien, y es gracioso porque estamos peleando entre nosotros de nuevo en la Extreme E", sentenció Rosberg, refiriéndose a los equipos que poseen los dos pilotos en la categoría eléctrica.

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