Reparan daños en el trazado antes de arrancar el GP de Miami F1

Aparentemente, la principal zona de preocupación está en la curva 17, la horquilla de izquierdas que precede a las últimas curvas que llevan a la recta de meta. También hubo un problema con la curva 7, un giro a izquierdas que se estrecha y que está situada junto al ya famoso falso puerto.

El jueves por la tarde se hicieron evidentes algunos pequeños daños en la curva 17, un par de metros fuera del vértice y ubicadas más o menos en la línea que cogen las ruedas exteriores de los monoplazas, las que más sufren en dicha sección.

Lo curioso de todo esto, es que los daños aparecieron antes de que ningún coche de carreras rodara por el circuito, ya que hasta ahora sólo el coche de seguridad y el coche médico han pasado por encima de ese asfalto, así como los camiones, autobuses y grúas que han participado en la construcción del trazado.

Se entiende que en ambas zonas hubo un problema específico que surgió en el momento en el que se colocó la superficie y esa sería la causa. Los organizadores creen que las zonas problemáticas están localizadas y confían "en que no haya problemas en el resto de la pista".

Los trabajos de reasfaltado se completaron el viernes por la mañana, antes de los entrenamientos libres que darán el pistoletazo de salida al primer Gran Premio de Miami de la historia de la F1.

Bajo la supervisión de los diseñadores del trazado de Miami, Apex, la pavimentación del circuito requirió 24.000 toneladas de asfalto, que se colocaron en casi 78.000 metros sobre tres carriles, construyendo una pista con una media de 50 pies de ancho (unos 15 metros).

Los especialistas en asfalto R3, que ya han trabajado en muchos circuitos de Fórmula 1 alrededor de todo el mundo, diseñaron una mezcla con un 60% de granito extraído de Georgia y el resto era caliza del sur de Florida. El betún, que es una mezcla viscosa de hidrocarburos, se utilizó para conectar o unir los añadidos.

Una vez colocado, el betún de la superficie se retiró para texturizar la superficie, abriéndola con el objetivo obtener los niveles de agarre requeridos por los exigentes neumáticos de Pirelli de la F1.

La FIA exigió que el asfalto se colocara al menos 60 días antes del fin de semana de la carrera, y ese plazo se cumplió pese al trabajo que hubo en torno a otros múltiples eventos en el estadio, como la final de la temporada de fútbol americano de la NFL, un festival de música de jazz y el torneo de tenis 'Miami Open'.