La relación entre Verstappen y Horner vale más que un contrato

Se podría decir que Max Verstappen fue un niño prodigio. Desde sus primeras andaduras con un kart con el apoyo de su padre Jos Verstappen, hasta su primer y temprano debut al volante de un Fórmula 1 cuando ni tan siquiera era mayor de edad, el piloto neerlandés ha conseguido dejar boquiabiertos a todos aquellos que se han cruzado en su camino.

Saltándose todos los pasos previos, Max Verstappen llegó a la Fórmula 1 en la temporada 2016 como piloto de Toro Rosso (ahora AlphaTauri). Su cara le delataba, así como algunas acciones en pista que cruzaban ciertos límites. Pese a esa juventud e inexperiencia, rápidamente el neerlandés puso de acuerdo a todos los expertos y empezó a ganarse el apodo de "la estrella del futuro".

Ese futuro ya ha llegado, de hecho, ganando el campeonato de pilotos de 2021 alcanzó ese éxito que tantos años llevaba persiguiendo. Campeón del mundo de F1 a los 24 años y después de destronar a Mercedes y a un Lewis Hamilton que iba camino de un récord que le habría situado como el piloto más laureado de la historia de la máxima categoría en solitario con ocho títulos mundiales.

En estos momentos y después de haber llegado a la más alto, prácticamente nadie duda de que el futuro de Max Verstappen está en Milton Keynes, sede de Red Bull Racing. Sin embargo, el contrato actual del piloto neerlandés se termina a finales de 2023.

Teniendo ese dato en cuenta, el director del equipo de las bebidas energéticas, Christian Horner, se mostró bastante relajado al respecto y aseguró que la relación entre el piloto y el equipo no se basa en un simple contrato, sino en las relaciones humanas que hay de por medio.

"Max llegó al equipo casi como un niño, durante todo este tiempo ha crecido y se ha desarrollado junto al equipo. Creo que la relación y la confianza que compartimos entre nosotros vale bastante más que cualquier hoja de papel (contrato). Espero competir con Max durante muchos años más y creo que los mejores años están por venir", concluyó Christian Horner.