Los hijos pródigos de la Fórmula 1

La historia de la Fórmula 1 está llena de sucesos y giros inesperados. Los pintorescos primeros años son fuente abundante de anécdotas curiosas, pero la actualidad tampoco está exenta de ellas.

El regreso de Fernando Alonso al Gran Circo tras su retirada a finales de 2018 fue, en julio de 2020, una de las noticias más sorprendentes de los últimos tiempos. El asturiano acudió a su tercera etapa con Renault (ahora Alpine), después de ser campeón con ellos en 2005 y 2006, y volver tras su año de pesadilla en McLaren en 2007.

Precisamente, su nuevo compañero, Esteban Ocon, fue ese mismo 2020 el penúltimo capítulo de los retornos que decenas de pilotos han protagonizado desde 1950 con diferentes constructores.

Hemos hecho un repaso a otros casos de pilotos que volvieron a correr para equipos con los que ya habían competido con anterioridad. Algunos, también lo hicieron en tres ocasiones, como Alonso.

Quizás uno de los más curiosos es el de Bruce McLaren, fundador del equipo de Woking, que durante tres carreras de la temporada 1967 dejó de correr con su propio monoplaza para hacerlo con los Eagle T1G de Anglo American Racers, liderado por Dan Gurney. ¿La explicación? El nuevo McLaren M5A con motor BRM V12 aún no estaba listo.