El nuevo contrato de Verstappen podría ser clave en el futuro de la F1

Hasta la fecha, Max Verstappen es el único piloto de la historia de la Fórmula 1 que ha firmado un contrato válido para las siete temporadas siguientes, algo que ha sido sorprendente para la gran mayoría de expertos.

Echando la vista atrás, el propio neerlandés tenía una cláusula con la que podría haber rescindido su acuerdo con Red Bull a lo largo de la temporada 2019, siempre y cuando hubiese llegado al parón de verano por detrás de los tres primeros en la clasificación de pilotos.

Sin embargo, el neerlandés llegó al ecuador de la temporada en tercera posición, por detrás de Lewis Hamilton y Valtteri Bottas. Estas cláusulas suelen ser habituales cuando un piloto quiere asegurarse un coche competitivo y, por otra parte, el equipo las acepta cuando tiene una base suficientemente sólida como para no asumir un riesgo demasiado grande.

En el caso de Verstappen, no obstante, ha superado todas las expectativas técnicas posibles, porque una duración de contrato de siete años es, siendo realistas, demasiado a largo plazo para cualquier previsión, incluso aunque aparente ser el mejor proyecto de la historia.

Según varios directivos que llevan años trabajando en el paddock de la Fórmula 1, las renovación entre Verstappen y Red Bull debería haber sido por dos años, con una extensión que llegase hasta el final de la temporada 2025, es decir, justo antes del nuevo ciclo técnico que verá la llegada de una nueva generación de unidades de potencia.

Finalmente, todas esas predicciones han demostrado ser rotundamente erróneas. Pero la pregunta que surge es por qué Verstappen y Red Bull han firmado un acuerdo tan extenso.

¿Por qué un piloto, especialmente una estrella como Verstappen, siente la necesidad de prolongar su relación con un equipo durante tanto tiempo? En el pasado esto nunca había sucedido, pero ahora parece haber una razón para ello, y es el peligro de la posible introducción de un sistema de tope presupuestario también para los pilotos.

El tema de los "sueldos" está en la agenda de la máxima categoría desde hace unos dos años, pero en estos momentos las conversaciones entre los equipos y la FIA están estancadas. No obstante, se cree que dentro de un par de temporadas, el reglamento financiero podría introducir un nuevo tope salarial que únicamente afecte a los pilotos, colocando una cifra que cada equipo podrá superar a la hora de firmar un contrato con un piloto.

Si se aplica esta norma, Verstappen (y todos aquellos pilotos cuyos contratos expiren después de la fecha de entrada en vigor del reglamento) estarán exentos de dichos límites, ya que no podrán renegociar los contratos ya firmados.

Verstappen se ha asegurado así uno de los sueldos más altos de la historia (unos 50 millones) hasta 2028, mientras que Red Bull tiene la certeza de que ningún equipo rival podrá ofrecerle a Max un salario equivalente al ya firmado.

Por otra parte, si Verstappen decide abandonar Red Bull antes de la fecha límite, perderá una parte importante de su salario siempre y cuando entre en vigor el tope salarial para pilotos, un elemento disuasorio que permitirá que Helmut Marko pueda dormir tranquilo durante los próximos años.