Mick Schumacher: "Era el asiento de mi padre y encajé perfectamente"

El piloto de Fórmula 2 deleitó a los aficionados con una breve demostración del coche que llevó a su padre a su séptimo título mundial y a la victoria del Gran Premio de Alemania de 2004.

Schumacher admitió que estaba ansioso por salir, y muchas emociones recorrieron su cuerpo hasta ese momento. "Solo quería salir y conducir", dijo Schumacher. "Obviamente, tener que esperar, incluso para la salida, fue como una tortura. Yo solo quería encender [las luces] y salir".

"Saliendo del pitlane y entrando al pitlane nunca perdí la sonrisa. Siempre estuvo en mi cara. ¡Incluso cuando bloqueé ruedas estaba sonriendo! Fue realmente genial".

Schumacher aseguró que la experiencia con el coche fue aún más especial porque usó el asiento original de Michael. "Fue genial", explicó. "Fue increíble poder conducir el coche precisamente aquí. Era el asiento de mi padre y me encajaba perfectamente. Así que eso incluso lo hizo más especial”.

Tras haber conducido un Ferrari a principios de este año, y un Benetton de 1994 en 2017, Schumacher aseguró que fue consciente de cuánto ha avanzado la F1 en cuanto a tecnología.

"He podido percibir en primera persona cómo han transcurrido 10 años hasta ahora. En general, creo que el desarrollo entre 1994 y 2004 fue un gran paso. Poder conducir el V10, y sentir cómo se comportaba y cómo sonaba, ha sido algo muy especial”.

"La gente me preguntaba si podía escucharles, pero dije que el motor V10 era un poco ruidoso, así que fue difícil para mí escuchar alguna otra cosa", aseguró.

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