La F1 defiende su proceder en el 'caos' del GP de Australia

McLaren informó el jueves por la tarde que uno de sus miembros había dado positivo en un test por coronavirus, por lo que decidieron retirarse del GP de Australia.

Eso provocó intensas negociaciones entre los equipos sobre la posibilidad de seguir adelante, y no fue hasta las 10.08 hora local del viernes (00.08 en España) –a dos horas del inicio de los libres 1– cuando se canceló de manera oficial el evento.

La F1 recibió múltiples críticas por cómo manejó la situación, después de que varios miembros destacados manifestaran sus preocupaciones antes incluso de la cancelación.

Entre los más combativos estuvo Lewis Hamilton, seis veces campeón del mundo, que dijo el jueves que estaba en "shock" porque la carrera se celebrase después de los últimos acontecimientos a nivel internacional.

Chase Carey, CEO de la F1, dio la cara el viernes tras la cancelación de la carrera y aseguró que los jefes de la categoría habían dado el máximo para gestionar una "situación muy cambiante".

"Creo que hemos tomado las decisiones correctas, que hemos trabajado bien con nuestros socios", apuntó el estadounidense. "Creo que todos estamos decepcionados de no correr aquí, pero estos son momentos complejos y creo que hemos tomado las decisiones que teníamos que tomar".

"Pasamos la noche recopilando puntos de vista de todos. Fue una decisión conjunta entre la FIA, nuestros socios australianos, nosotros mismos, y con aportes de los equipos. Como era de esperar, hubo una variedad de puntos de vista".

"Tuvimos que lidiar con cosas en tiempo real en una situación desafiante, muy difícil. ¿Hubo diferentes puntos de vista y opiniones diferentes? Sí. Creo que eso es lo que todos intentaron resolver. Pero creo que llegamos a un punto en el que todos estamos de acuerdo en que tomamos la decisión correcta".

Después de que la F1 aterrizara en Australia, se dieron una escalada de respuestas a la pandemia de coronavirus en múltiples países.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció una prohibición que impide a vuelos europeos llegar a su país, lo que obligó a cancelar la ronda del Mundial de Resistencia en Sebring.

La temporada de la NBA también se suspendió con efecto inmediato, como la Euroliga y la liga española de fútbol (que aplazó, de momento, sus dos siguientes jornadas).

"Creo que tomamos la decisión correcta según evolucionó todo. Sentimos que trabajamos bien con todos nuestros socios para tomar esa decisión", defendió Carey.

"Obviamente, no podemos controlar cómo evolucionan los diversos eventos. En muchos lugares del mundo, la situación en solo 24 o 48 horas es muy diferente de lo que era hace mucho tiempo. La gente viajaba entre Europa y Estados Unidos y ahora ya no pueden".

"Creo que estos son problemas con los que tienes que lidiar, ya sabes, en tiempo real, tomar decisiones eficientes y efectivas".

Cuando Motorsport.com le preguntó si la F1 se había planteado cancelar la carrera antes de que los equipos viajaran a Melbourne, Carey respondió: "Ciertamente llevamos debatiendo ese tema desde antes de la semana pasada. No es que saliera de la nada".

"Creo que tomamos la decisión de venir aquí en base a lo que sabíamos la semana pasada, cuál era la situación aquí en Australia, los eventos que se estaban celebrando y la cantidad de infecciones en el país. La situación en Europa era muy diferente hace una semana a la que es hoy. Pero ciertamente éramos conscientes. Fue algo que tuvimos que evaluar".

"Creo que hace una semana, cuando los equipos comenzaron a viajar a Melbourne, creímos que era la decisión correcta, y la situación cambió de muchas maneras al final. Siempre fuimos conscientes, y hemos mantenido esas reuniones y analizamos todo mucho", concluyó.