Imola no tendrá público de F1 en las gradas tras empeorar la situación
Las autoridades italianas han tomado a última hora la decisión de que el GP de Emilia Romagna de F1 en Imola, este fin de semana, sea a puerta cerrada.
Foto de: Ferrari Media Center
El circuito italiano recibió permiso el mes pasado para vender 13.000 entradas y pases VIP tanto para patrocinadores locales como para invitados de la autoridad regional que respalda la carrera.
Sin embargo, esta semana, un decreto de la oficina del primer ministro italiano Giuseppe Conte, conocido como DCPM, ordenó una serie de nuevas medidas frente a la COVID-19.
Incluye medidas drásticas para los eventos multitudinarios, así como restricciones más generales, como el cierre de restaurantes y bares en todo el país a las seis de la tarde.
En los últimos dos días, el gobernador de la región de Emilia Romagna, Stefano Bonaccini, habló directamente tanto con el primer ministro como con el ministro de salud en busca de un permiso para la carrera, pero no lo logró.
Imola tenía un plan muy estudiado para asegurar un distanciamiento social efectivo al distribuir a los aficionados alrededor de las tribunas, y tras recibir el visto bueno para albergar espectadores, había gastado dinero en los preparativos necesarios.
Si bien no había vendido todas las 13.000 entradas que se ofrecían, Imola esperaba que a última hora muchos las compraran, ya que la gente estaba esperando a ver si se cancelaba o si se decidía hacerlo a puerta cerrada, como finalmente ha sido.
"El gobierno ha prohibido que haya aficionados y estamos muy decepcionados por ello", dijo el jefe de Imola, Uberto Selvatico Estense, a Motorsport.com. “Lamentamos mucho también las molestias que se generan por esa decisión".
“El gobernador de Emilia Romagna habló con el ministro de salud hoy, pero negaron cualquier renuncia al decreto".
“No es fácil explicarle a la afición que el gobierno ha cambiado de opinión en muy poco tiempo, porque hace apenas una semana confirmaron que se nos permitía tener público".
"Así que seguimos adelante con toda la organización, con todo lo que estábamos preparando. Gastamos mucho dinero en estar listos para esta oportunidad".
“Ahora solo quedan cuatro días para el evento, muy poco tiempo para decirle a la gente que cancelamos la asistencia".
“Ahora tenemos que explicar a los espectadores que no hay duda de que les reembolsaremos el dinero de las entradas".
"Seguramente nos enfrentaremos a algunos problemas con la gente que intentará entrar. Compraron una entrada y no entenderán ahora por qué no les dejan".
Un portavoz de F1 le dijo a Motorsport.com. “Esperábamos dar la bienvenida a los aficionados a la carrera de este fin de semana, pero entendemos y respetamos completamente la decisión tomada por las autoridades. Esperamos que nuestros aficionados sigan disfrutando de la carrera desde casa".
La prohibición de multitudes de Imola se produce poco después de una decisión similar en Turquía, mientras que en Alemania los espectadores de ciertas áreas solo podían entrar al circuito si presentaban un certificado de haber dado negativo a un test de COVID-19.
También a última hora se redujo el número de aficionados que podrían ir al GP Portugal, y antes de la carrera, la policía no dejó entrar a gente que tenía entrada, alegando que el lugar había alcanzado la capacidad permitida.
Fotos de la anterior carrera de F1 con público en las gradas: mucha gente, pocas mascarillas
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