Salvo Bottas, que se tenía que adaptar a un coche nuevo, y Vettel, Hamilton fue el piloto más activo de la pretemporada. 468 vueltas en total al Circuit de Barcelona-Catalunya le hacían estar preparado para la primera carrera. En la primera semana dio 201 vueltas y logró el cuarto mejor tiempo, con Bottas primero y los Ferrari tras Valtteri y por delante de Lewis.
Los últimos cuatro días fueron más activos aún, aunque Hamilton no igualaba los tiempos de los Ferrari ni de Bottas. Dejaba la duda de si se guardaba algo o de si su nuevo compañero podría ponerle tantas dificultades como el anterior.
El circuito de Albert Park daba inicio a la 11ª temporada de Hamilton en Fórmula 1. La quinta en Mercedes.
Lewis Hamilton comenzó el campeonato con este casco, blanco y amarillo. Hizo un concurso para que sus fans eligieran el diseño ganador.
Primera clasificación, primera pole para el británico. Era la cuarta consecutiva (había logrado las tres últimas de 2016). Se impuso por dos décimas a Vettel y a su compañero Bottas.
Pese a salir desde la pole,
no pudo con Vettel en Australia y se tuvo que conformar con la segunda plaza. El alemán le ganó en la estrategia gracias a un 'undercut' al que contribuyó Verstappen, tras el que Lewis se quedó atrapado después de su parada. Ahí comenzaría una batalla (en un principio muy deportiva) que se prolongaría toda la temporada.
Dos de dos para Hamilton en clasificación. Vettel había dominado pero, llegado el momento de la verdad, en Q3, Lewis y su 'Hammertime' dejaron al alemán en segunda posición.
En una carrera complicada, con condiciones cambiantes,
Hamilton hizo valer su pole para llevarse la victoria en una trepidante carrera. Vettel llegó segundo, por lo que el mundial quedaba completamente empatado entre ambos.
En la tercera prueba, fue el otro Mercedes, el de Bottas, el que se anotó la pole. Hamilton se quedó a solo 23 milésimas (0.023 segundos) de su compañero, pero logró superar a su rival Vettel, que clasificó tercero.
Gracias a la estrategia (favorecida por el tapón que Bottas hizo a Hamilton en los primeros compases de
la carrera de Bahrein), Vettel ganó y Hamilton acabó segundo.
Tras tres poles de Mercedes, Ferrari dio un paso al frente en clasificación y Vettel y Raikkonen lograron el doblete el sábado en Sochi. Vettel sacó menos de una décima a Kimi y a Bottas, y Hamilton se tuvo que conformar con la cuarta posición.
La batalla estratégica esta vez fue para Mercedes.
Bottas robó la primera plaza a Vettel en la salida y ganó pese a la presión final del alemán. Hamilton se quejó de “faltas de potencia intermitentes” en algún punto de la carrera y acabó fuera del podio por primera vez desde principios de octubre de 2016, 4º, quedándose a 13 puntos de Sebastian.
Hamilton volvió a la pole en Barcelona. Dominó la clasificación, aunque en la Q3, la definitiva, Vettel se quedó a solo 0.051 segundos.
Aunque Vettel le robó el liderato en la primera curva
Hamilton ganó la carrera de España favoreciéndose de una mejor estrategia de Mercedes y sobre todo del trabajo de Bottas, que taponó a Vettel y le hizo perder mucho tiempo. El mundial se apretaba y la distancia entre ellos pasaba a ser de 6 puntos.
La de Montecarlo fue la peor clasificación del año para Hamilton. El inglés no se sintió cómodo con su W08, no encontraba el funcionamiento de los neumáticos, y decidió utilizar las primeras vueltas de la Q2 para calentarlos y jugárselo a una carta, cuando las gomas tuvieran la temperatura óptima. Sin embargo, un accidente de Vandoorne le impidió mejorar en esa última vuelta y cayó en la segunda tanda, siendo 14º (saldría 13º por sanción de Button).
Gestionando bien su doblete en clasificación,
Ferrari permitió la victoria de Vettel. Lewis tuvo que disputar la carrera en una zona de parrilla a la que no está acostumbrado y únicamente logró alcanzar la séptima plaza, sumando seis puntos. Hamilton salió de allí con 25 menos que Vettel.
El de Mónaco fue, efectivamente, el peor fin de semana del año. Peor clasificación (13º), peor resultado en carrera (7º) y máxima diferencia de puntos respecto al líder del mundial (25). Un lunar en un año brillante para Mercedes.
Dispuesto a recuperarse de Mónaco, Hamilton no dio opción a nadie en el Circuito Gilles Villeneuve. Superó a Vettel por tres décimas y se hizo con una incontestable pole con la que además igualaba las 65 de Ayrton Senna.
En un emotivo acto, la F1 regaló a Lewis Hamilton una réplica del casco de Ayrton Senna que hizo emocionarse al inglés.
Desde la pole, Hamilton ganó la carrera de Canadá 2017 liderando de principio a fin. Sin embargo, su rival Vettel lo tuvo peor. En la salida se tocó con Verstappen y dañó su Ferrari, teniendo que entrar en boxes a hacer las reparaciones necesarias y colocándose último. Pudo remontar hasta el 4º lugar bajando del podio por primera vez en 2017, y la diferencia en el campeonato pasó a ser de 12 puntos.
El de Bakú era un circuito favorable a Mercedes y Hamilton directamente voló en clasificación. Tras una bandera roja provocada por Ricciardo en Q3, el inglés se marcó una vuelta que le daba su pole número 66. Dejaba a Bottas a 4 décimas y a los Ferrari a más de un segundo. Vettel saldría 4º.
Uno de los momentos cumbre de la temporada.
La carrera del GP de Azerbaiyán 2017 tuvo de todo. Hamilton lideraba y cuando apareció uno de los dos Safety Car ralentizó tanto el ritmo antes de relanzarse la carrera que Vettel no pudo esquivarle y le tocó por detrás. Eso provocó la furia del alemán, que colocó su Ferrari al lado del Mercedes y le embistió, llevándose una sanción de stop and go de 10 segundos y teniendo incluso que declarar ante la FIA en París para disculparse y que su castigo no fuera mayor.
El coche de Hamilton, sin embargo, no sufrió daños pese al impacto, aunque el inglés no podría ganar. En un caso extraño, se le aflojó el reposacabezas de su Mercedes W08 (el equipo, en la foto, lleva la pieza de repuesto). El reposacabezas se levantaba en las rectas de alta velocidad y el piloto tenía que sujetarlo con una mano, dejando la otra en el volante. Hamilton se vio obligado a entrar en boxes a hacer la reparación y esa parada extra le hizo caer hasta la 5ª plaza.
A pesar de todo, Vettel había acabado 4º y conseguía no perder puntos con Hamilton, sino ganar dos. Hamilton se quedaba a 14 puntos, aunque salía más reforzado mentalmente que su rival. Pese a las
declaraciones post carrera (“Si quiere demostrar que es un hombre que lo haga fuera del coche”), Hamilton no reaccionó sobre el asfalto y hay dudas sobre si el Hamilton del pasado se habría quedado quieto.
Hamilton se enfrentaba a una sanción de 5 posiciones por sustituir caja de cambios y fue tercero en la clasificación, por lo que salió 8º. Su compañero le hizo un favor logrando la pole y dejando a Vettel 2º.
Saliendo 8º, Hamilton no logró llegar al podio, pero su compañero
Bottas ganó la carrera de Austria resistiendo al ataque de Vettel. El inglés fue 4º, y quedó a 20 puntos de Sebastian en el mundial.
Una magnífica vuelta en su último intento en Q3 (ayudado por el mapa de motor de Mercedes) le dio la pole a Hamilton con más de medio segundo de diferencia respecto a los Ferrari, que salían 2º (Raikkonen) y 3º (Vettel). Era su pole número 67, la sexta de la temporada.
Hamilton ganó sin problemas, dominando de principio a fin la carrera de Silverstone. El drama fue para Ferrari. A dos vueltas del final de la carrera, con Raikkonen en el podio y Vettel cuarto, el finlandés sufrió un pinchazo de neumático. Vettel había heredado la tercera posición, pero una de sus ruedas también se reventó y el alemán tuvo que recorrer medio circuito con el neumático dañado y se vio obligado a parar. Cayó del podio y tuvo que acabar 7º. Esa sangría de puntos permitió a Hamilton quedarse a un punto en la lucha por el título.
Llegaba otro de los pocos circuitos donde Mercedes no llegaba como favorito y el viernes y el sábado se confirmó. Los Ferrari lograron el doblete y, sin el mejor coche, Hamilton no pudo con su compañero Bottas, logrando la cuarta plaza. Saldría tres posiciones por detrás de su rival Vettel, que se llevó la pole.
Con un gran trabajo de compañero de Raikkonen,
Vettel ganó la carrera de Hungría. Hamilton, taponado por Raikkonen, solo pudo acabar 4º, bajando del podio en la última prueba antes de las vacaciones y yéndose de vacaciones a 14 puntos de Sebastian.
En la carrera de Hungría ocurrió otro de los episodios que permiten hablar de otra versión de Hamilton. Era cuarto y Bottas iba tercero, tras los Ferrari. El inglés pidió al equipo que le dejaran pasar a su compañero y prometió que, si no lograba su deseo de adelantar a Raikkonen y Vettel, devolvería la posición de podio a Valtteri. Hamilton luchó contra Raikkonen pero no pudo pasarle y, en el último giro, levantó el acelerador y
esperó a Bottas para dejarle pasar y devolverle la tercera plaza, quedándose él con la cuarta. Se arriesgó a ser adelantado por Verstappen, que iba muy cerca de Bottas.
Volvía la F1 de vacaciones y Hamilton intentaba dar la vuelta a la clasificación. Logró imponerse el sábado en Spa y llevarse la pole, la 68ª de su carrera, con la que conseguía igualar el récord histórico de Michael Schumacher. Vettel fue segundo, y saldría justo tras él.
Vettel llegó a estar muy pegado e incluso a intentar el adelantamiento. Parecía que lo conseguiría, pero Hamilton hizo valer su motor y se llevó la victoria. Se quedaba a siete puntos.
El sábado llegó la lluvia a Monza y Ferrari se quedó helado. El SF70H no funcionó y Vettel y Raikkonen, impotentes, solo pudieron ser 8º y 7º respectivamente en clasificación. Sebastian acabaría saliendo 6º por sanción de varios pilotos al cambiar piezas de sus motores. La pole de Hamilton, la número 69, le daba el récord en solitario.
Ya sin lluvia, Hamilton consiguió llevarse el triunfo y alcanzar, por primera vez en la temporada, el liderato. Vettel pudo subir al podio pero Bottas hizo su trabajo y quedó segundo, por lo que el de Ferrari, en casa, perdía la primera plaza y se quedaba a 3 puntos de su rival.
Llegó Singapur y se hizo de noche. Literalmente y también en cuanto a sensaciones y resultados. Vettel, crecido, se llevó la pole position, y Mercedes volvía a ver los fantasmas de 2015, cuando también sufrió en Singapur y vio cómo Sebastian se imponía. Hamilton había sido superado por los dos Ferrari y los dos Red Bull, y partía quinto con el objetivo de perder el menor número posible de puntos.
Pero pronto supo que las cosas no iban a ser como esperaba. Había llovido antes de la carrera y con el asfalto mojado todo se complicó. Con neumáticos intermedios, Vettel no arrancó bien y tuvo que cerrar la puerta a Verstappen, cruzando casi toda la pista. Por el exterior iba un Raikkonen que sí había salido muy rápido y que pretendía llegar al primer giro por delante del Red Bull para hacer de escudero de su compañero y de paso arrebatar puntos a Hamilton. Sin embargo, entre los Ferrari arrinconaron a Max, y hubo un efecto dominó en el que el holandés tocó a Kimi y este, a su vez, se llevó por delante a Vettel. Abandono de Verstappen y Raikkonen y daños en el Ferrari de Vettel... Hamilton, por su parte, evitó todos los problemas y comenzó a ganar opciones.
Hamilton se había puesto segundo tras el abandono de Raikkonen y Verstappen, con un Vettel que mantenía el liderato pero llevaba el Ferrari muy tocado. El alemán no duró más de dos vueltas y, casi tocándose con Hamilton, acabaría trompeando para abandonar definitivamente. Estaba llamado a salir líder, y sumaba un 0, el primero del año.
Sin Vettel, Raikkonen, ni Verstappen, Hamilton tuvo una alfombra roja hasta la victoria. Ganó plácidamente y dio un enorme golpe al mundial. De salir por detrás en la tabla, a sacar a Sebastian 28 puntos. Ahí se le puso cara de campeón.
Sebastian Vettel se ganó, en los entrenamientos libres, el cartel de favorito. Sin embargo, otro golpe de mala suerte para el alemán, cuyo coche falló al final de la FP3 y no le permitió disputar la clasificación, obligándole a salir último. Hamilton sumó otra pole más y estaba escoltado, en segunda posición, por Raikkonen, compañero de Vettel...
... pero el finlandés no pudo ayudar a su compañero, ya que no pudo ni comenzar la carrera. Hamilton se quedaba con los Red Bull como únicos rivales, y aunque Vettel remontó de último a 4º, el británico no falló. No ganó, pero sumó 18 puntos que incrementaban aún más la distancia. El triunfo fue para Verstappen, que atacó a Lewis sabiendo que no querría jugársela. Al nuevo Hamilton no le importó no pelear la victoria estando su rival detrás. Se quedaba 34 puntos por delante.
El inglés logró la pole en Suzuka y logró que Bottas se colara entre él y Vettel. Seguía edificando el título.
Vettel se quedó 'fuera de juego' ya en la vuelta de formación, y aunque pudo empezar la carrera, rápidamente se quedaría sin potencia y tendría que abandonar. Un 0 unido a los 25 puntos que se llevó cómodamente Hamilton dejaban en 59 puntos la ventaja a falta de 100 por repartirse. Tal era la diferencia, que en la siguiente carrera ya podía haber campeón.
Era el favorito a lograr la pole y cumplió. La primera piedra para proclamarse tetracampeón en Austin estaba puesta. Vettel saldría justo tras él.
Era el primer 'match' ball de Hamilton, aunque tenía que ganar y esperar resultado de Vettel. Él hizo su parte, pero el alemán logró el segundo puesto y retrasó la fiesta de Hamilton. Aun así quedó todo visto para sentencia, y en México le bastaba con ser quinto hiciera lo que hiciera Seb o simplemente noveno si el de Ferrari no ganaba la carrera.
Tras tocarse con Vettel en la tercera curva de la carrera, Hamilton solo pudo ser 9º, pero su rival acabó 4º y el inglés se proclamó tetracampeón del mundo en México. Fue su peor resultado de la temporada, superando el de Mónaco, pero la suerte estaba echada, y Hamilton entraba en el club de Alain Prost, Sebastian Vettel, Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher.
Lewis Hamilton
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