Todos los ojos apuntarán a Alexander Albon este fin de semana en Spa-Francorchamps, dado que el piloto anglo tailandés tendrá la oportunidad de debutar en un monoplaza ganador como el Red Bull en su primera temporada en la Fórmula 1.

En el otro lado de la moneda estará Pierre Gasly, que ha tenido que dar un paso atrás en su carrera deportiva y volverá a lucir los colores de Toro Rosso, como en 2018. Pero parece que el francés no ha dejado que la noticia le desanime, o al menos eso intenta demostrar.

"La pausa veraniega ha terminado y afrontaré el resto de la temporada con mi familia italiana. Estoy contento de trabajar de nuevo con Toro Rosso. He tenido un par de semanas para relajarme y entrenarme de cara a las próximas carreras, así podré dar el máximo por el equipo", reconoce el galo antes del GP de Bélgica 2019.

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"Ha sido bonito tener un poco de tiempo libre para reflexionar sobre la primera mitad del año, pero ahora estoy completamente concentrado en el resto de la temporada y estoy listo para volver a comenzar".

"Esta semana estamos ocupados con los preparativos. He ido a la fábrica para encontrarme con mis ingenieros y preparar el asiento, e intentar estar lo más preparado posible para afrontar este fin de semana".

"Después de las vacaciones es fantástico volver a correr, sobe todo en Spa, mi pista favorita. Es un circuito que me encanta y he disputado allí grandes carreras. Gané por primera vez en Fórmula 4 y también gané en la GP2 2016".

"Ahora, el objetivo principal con Toro Rosso es sacar todo lo posible del monoplaza de aquí a final de año. Daré lo mejor que tengo para lograr los máximos puntos posibles y ayudar al equipo a defender su posición en el campeonato", concluyó Gasly.