Franco Colapinto puede estar jugándose su futuro en F1 en Canadá

El jefe de la escudería Alpine, Flavio Briatore, afirmó que no había "un límite establecido" sobre el número de carreras que Franco Colapinto disputará con el equipo. Pero después de tres grandes premios decepcionantes para el equipo francés, ahora es menos categórico sobre el futuro del argentino. "Siéntate mucho tiempo junto al río", reza una cita popularmente (e incorrectamente) atribuida a Sun Tzu, "y verás pasar flotando los cadáveres de tus enemigos".

La única certeza en Alpine es un estado constante de incertidumbre: en los últimos años se ha contratado y despedido a tantos altos ejecutivos que uno se pregunta si la tinta con la que se reflejan sus nombres y cargos ha tenido tiempo de secarse en el cristal esmerilado de las puertas de los despachos.

Este juego de sillas musicales se extiende ahora a los propios coches, después de que Jack Doohan fuera bajado del suyo tras el Gran Premio de Miami para dejar paso a Colapinto. Aunque el anuncio oficial dejaba claro que el americano disputaría cinco carreras, después eso se evaporó, cuando el "asesor ejecutivo" Briatore -ahora director de facto de la escudería- afirmó que esa cifra debía haber sido inventada por otra persona, y que no había "ningún límite establecido" para el número de carreras que disputaría Colapinto.

El escenario se volvió aún más confuso durante la peculiar comparecencia de Briatore en la rueda de prensa de directores de equipo del Gran Premio de España. "Nunca digo cinco carreras, tres carreras, cuatro carreras, una carrera", dijo. "Si Colapinto rinde, pilotará el coche. Si no, ya veremos".

Franco Colapinto, Alpine habla con Flavio Briatore, Alpine

Foto de: Sam Bagnall / Motorsport Images via Getty Images

No hay duda del tono de amenaza, y con razón: en sus tres primeras carreras para Alpine, Colapinto ha demostrado todos los malos hábitos que mostró en Williams la temporada pasada (donde sustituyó a Logan Sargeant para las últimas nueve rondas) y poco del ritmo que sí logró enseñar. Cuando se subió al FW46 en Monza en 2024, su rendimiento mejoró instantáneamente respecto a Sargeant, pero no ha sido así en el A325 de Alpine.

En la primera aparición con Alpine, en Imola, el corredor nacido en Pilar malinterpretó una instrucción por radio al salir del garaje tras una bandera roja en la Q1, y recibió una penalización en parrilla por incorporarse al "carril rápido" antes de que se hubiera confirmado el tiempo de reanudación. Poco después, un momento de imprecisión a la salida del Tamburello tuvo consecuencias devastadoras, ya que pisó con una rueda la tierra e hizo un trompo contra el muro.

En Mónaco, Colapinto fue eliminado en la Q1 y luego tuvo que esforzarse para remontar hasta el 13º puesto, doblado dos veces, culpando a una estrategia que le obligaba a empezar la carrera con el neumático duro. De hecho, el resultado fue una combinación de empezar tan atrás y sufrir las maniobras de Racing Bulls y Williams. 

Un problema en el tren motriz, que requirió una nueva caja de cambios, provocó que quedara eliminado en la Q1 de nuevo en Montmeló, ya que su coche se paró al final del pitlane antes de que pudiera salir a rodar de nuevo. La evolución de la pista prácticamente garantizó que otros pilotos superaran su tiempo en sus segundas tandas de la Q1. Luego, en la carrera, sólo pudo ser 15º a pesar de la oportunidad que le brindó el Safety Car en la parte final.

"Tengo que centrarme en Canadá", dijo tras el Gran Premio de España, y es cierto, porque los rumores ya están sonando. La posibilidad de que Sergio Pérez sustituya a Colapinto de forma inminente es el resultado de la intuición de un medio de comunicación, basada en el apetito por el dinero de Briatore. Ciertamente, el mexicano llevaría consigo patrocinadores ricos, pero se cree que está centrado en completar un regreso a la Fórmula 1 con Cadillac la próxima temporada, y no tiene nada que ganar al exponerse en un coche de la zona media en este momento.

Lo más probable es que sea el piloto de pruebas de la casa de Enstone, Paul Aron, que actualmente compite en Fórmula 2, o incluso Doohan, que sigue en nómina como piloto reserva, sentado junto al proverbial río. 

Briatore tiene fama de despiadado y, como demuestra su evasiva sobre el programa de carreras de Colapinto, de no hacer siempre lo que dice que va a hacer. Pero desde arriba le presionan para que obtenga resultados, y él redirigirá esa carga hacia los que están por debajo de él, incluidos los pilotos. Como también dijo durante la rueda de prensa en Barcelona: "No sé en este momento si Franco se quedará para la temporada o no, pero vamos a ver. Depende del rendimiento. Sólo miramos el rendimiento, nada más".