Los equipos ya pueden acabar sus chasis para 2018

Las reglas definitivas del Halo, que será obligatorio en la próxima temporada de F1 y Fórmula 2, ya habían sido presentadas, pero los equipos estaban esperando a ver cómo se aplicarían los test de este nuevo dispositivo de seguridad.

El Halo, una pieza desarrollada para proteger la cabeza de los pilotos, afecta la distribución de las cargas sobre el chasis. La complicación es que el test no se puede hacer con un Halo real, porque fallaría antes de los montajes del chasis.

El retraso en la definición de estas normas de prueba ha causado frustración para algunos equipos, en particular para aquellos cuyo nivel de recursos hace que los parámetros clave de diseño deban congelarse anticipadamente para ajustarse a la normativa. 

Pero después de hablar con los equipos, la FIA ha definido el test y ha modificado los reglamentos técnicos como consecuencia de ello. Esos cambios fueron ratificados por el Consejo Mundial del Motor reunido en París el jueves.

Con respecto a la prueba, la FIA dice que se debe utilizar una estructura ficticia en lugar del Halo.

Para cada test, las cargas máximas deben aplicarse en menos de tres minutos y mantenerse durante cinco segundos.

Tras cinco segundos de aplicación no debe haber fallo de ninguna parte de la célula de supervivencia o de cualquier unión entre la estructura y el cockpit. La naturaleza de la carga y la forma en la que se aplica se detalla en el reglamento.

El Consejo Mundial del Deporte Motor también ratificó los cambios en las regulaciones técnicas que van enfocadas a mejorar la fuerza del chasis y los sistemas de retención de los neumáticos para 2018.

En cuanto a los motores, la FIA adelantó el plazo en el que los fabricantes deben informar al organismo rector de su intención de suministrar motores. Ese tiempo va desde el 6 de mayo hasta el 1 de enero del año anterior al suministro.

Mira las fotos de las pruebas del Halo en 2017

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