La causa inédita de la chapuza de la alcantarilla en Portugal

El problema surgió en la última curva del circuito de Portimao, en los instantes finales de la tercera sesión de entrenamientos, después de que Sebastian Vettel levantara la tapa del alcantarillado a su paso por ese punto.

Aunque la Fórmula 1 ya ha vivido episodios similares con tapas de alcantarillas que se soltaban, en esta ocasión el problema fue la carcasa de hormigón en la que se asienta la cubierta. Ese problema provocó una bandera roja que puso fin a la FP3 y obligó a atrasar el inicio de la clasificación del GP de Portugal media hora.

Debido a que el marco alrededor de la cubierta del desagüe se rompió, se tomó la decisión de colocar un trozo de tubería de plástico en la apertura y cubrir todo con hormigón para que la reparación fuera rápida.

"En realidad, no fue la tapa de la alcantarilla en sí, lo que se rompió fue el marco de hormigón". explicó Masi. “Luego, lo que sobresalió sí fue la tapa del desagüe. Tan pronto como notamos eso suspendimos la tercera sesión para después empezar las reparaciones necesarias. Y se llevaron a cabo más controles en otros desagües del circuito”.

“Un problema así es algo que en realidad no habíamos visto antes, por eso verificamos todas las alcantarillas con todos los comisarios y operarios del circuito, porque esa era la manera más eficiente de hacerlo. Vimos un par de grietas que se repararon de inmediato”.

“Donde estaba el desagüe en la curva 14 en el lado izquierdo, la reparación se llevó a cabo colocando una tubería de plástico y llenándola con hormigón, para después poner otra capa de hormigón que tratamos de secar tan rápido como fuera posible. Eso llevó a un ligero retraso en la clasificación. Pero dadas las circunstancias, era mejor hacerlo y revisar las demás”.

"Tan pronto como acabó la clasificación y ya no hubo más actividad en pista el sábado, se realizaron más controles en todo el circuito y en todos los desagües como una medida de precaución adicional".

Masi cree que el problema salió a la luz debido a la carga aerodinámica generada por los coches de Fórmula 1.

“Probablemente no apreciamos las fuerzas que genera un coche de F1. La mejor manera de calificarlo es que fue un imprevisto, porque hay que tener en cuenta que el circuito se ha actualizado mucho para este gran premio, incluida una renovación completa del trazado, así como una serie de mejoras en las barreras de seguridad. Las alcantarillas también se revisaron".

El director de la GPDA, Romain Grosjean, que golpeó una tapa de alcantarilla suelta con su Haas en Malasia en 2017, dijo que antes de volver a la pista se aseguró de que las reparaciones se habían completado de manera correcta.

El francés dijo que no era tarea de los pilotos involucrarse en la inspección de las pistas.

"Estaba seguro de que el trabajo se hizo correctamente y que la FIA y el circuito resolvieron el problema", dijo el francés.

"Después de correr en un circuito podemos dar nuestra opinión. Pero no creo que dependa de nosotros hacer el trabajo de inspección”.