El festival de la F1 en Miami atrajo a 80.000 personas

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El fin de semana pasado, la Fórmula 1 celebró la quinta edición de uno de sus festivales más famosos. Después de Londres, Shanghai, Marsella y Milán, esta vez el entretenimiento se llevó a los aficionados en Miami. De acuerdo con la propia F1, 80.000 personas acudieron al Biscayne Boulevard en el centro de Miami el sábado para disfrutar del programa gratuito.

La atención se centró en el espectáculo de monoplazas de Fórmula 1 de diferentes épocas. El piloto de pruebas de Renault, Jack Aitken se puso al volante de un Renault Lotus E20 de la temporada 2012, Patrick Friesacher condujo un Red Bull RB7 del 2011.

Y mientras esos dos coches de Fórmula 1 con motores V8 emocionaron a los aficionados especialmente por el ruido, había mucho más para admirar y escuchar.

Takuma Sato en un Honda RA301 de 1968

El piloto de IndyCar, Takuma Sato, que ganó las 500 Millas de Indianapolis 2017, llevó un Honda RA301 de más de 50 años equipado con un motor V12. El coche había pertenecido a John Surtees en la temporada 1968 de F1. "En 1968 no habaía cinturón de seguridad", dijo Sato en una entrevista con Motorsport.TV.

El japonés se mostró encantado con el V12: "El motor es simplemente precioso, una obra maestra".

Por su parte, el bicampeón del mundo de Fórmula 1 Emerson Fittipaldi llevó el Ford Cosworth V8 en el McLaren M23 con el que ganó su segundo título en 1974. "Es muy emotivo para mí pilotar un F1 en Miami. Nunca lo habría esperado", declaró.

Sintió que inmediatamente retrocedía a los buenos viejos tiempos. "Incluso el olor es el mismo dentro del cockpit”, dijo riendo el brasileño de 71 años.

"El Festival de F1 de Miami consiste en darles a nuestros aficionados la oportunidad de acercarse a los equipos, los coches y los pilotos a los que admiran", Sean Bratches, Director Comercial de la Fórmula 1. El presidente y fundador de la Carrera de Campeones (que en 2019 se hará en Ciudad de México), Fredrik Johnsson, estuvo presente en el festival y quedó tan impresionado como el resto de fans. Dijo que ver a Fittipaldi con el M23 fue el mejor momento del día.

El hecho de que solo el sábado 80.000 aficionados estuvieran en el evento de Miami, es "genial" según Bratches, que da las gracias a las autoridades locales por el buen desarrollo del festival: "No sería posible sin el apoyo de las autoridades de la ciudad y el condado de Miami, el Departamento de Policía de Miami y los demás Servicios de emergencia que nos han apoyado durante todo el fin de semana".

Además de los ruidosos espectáculos de los coches de F1 que incluso hicieron trompos y quemaron rueda, los coches súper deportivos, como el McLaren Senna, también se lucieron. Aparte de eso, el festival de F1 de Miami cautivó a los fans con espectáculos de acrobacias, entretenimiento musical y se mostraron coches de exhibición.

Abraham Mateo y Silk City acudieron el sábado por la noche al Bayfront Park, justo después de la clasificación para el Gran Premio de Estados Unidos que se había podido seguir en directo en una gran pantalla. Luego, el domingo, en el segundo día del festival Miami F1, también se retransmitió la carrera que acabó con la primera victoria de Kimi Raikkonen en más de cinco años.

El último agradecimiento de Bratches fue para todos los involucrados: “Quiero dar las gracias enormemente a nuestros socios globales, a los equipos de F1 que aportan los coches y, lo más importante, a la gente de Miami por la oportunidad de organizar un evento tan ambicioso”.

En espera de la temporada 2020 de Fórmula 1, siguen los esfuerzos para acoger un gran premio de F1 en Miami. El primer borrador del diseño de un circuito pasa junto al parque Bayfront. "Creo que un Gran Premio de Miami sería el Mónaco de las Américas", dijo Emerson Fittipaldi, convencido del potencial de la posible nueva incorporación al calendario de Fórmula 1. Los aficionados que asistieron al festival de la F1 en Miami durante el fin de semana ciertamente quedaron impresionados.