'Menos mal que a Alonso le queda la Indy', por Nira Juanco

Fernando Alonso, McLaren

Foto: LAT Images

Hasta el pasado domingo, Fernando Alonso era el rey de Bahrein. Era el piloto que más veces había ganado en el desierto. Hasta en tres ocasiones había logrado levantar el bonito trofeo bahreiní. Aún recuerdo su última victoria en su debut con Ferrari en 2010... La alegría desbordada en la Scuderia... A Fernando posando con las banderas españolas e italianas en lo que parecía que iba a ser un camino de rosas hacia una nueva era de triunfos. Pero lo que llegaron fueron tres subcampeonatos y un divorcio, no del todo amistoso, cinco años después de ese día para el recuerdo...

Desde entonces, los italianos no habían vuelto a vencer en el trazado de Sakhir. Hasta este domingo. Con la victoria de Vettel, Ferrari revivió, en parte, ese 14 de marzo de 2010. Cierto es que no era el debut del alemán con los rojos y que no consiguieron un doblete como entonces. Pero Sebastian logró igualar a Fernando como el que más triunfos tiene en el reino bahreiní y sigue liderando el mundial, contra todo pronóstico, después de tres carreras.

"Volvimos a escuchar esos mensajes de radio en los que no te queda otra que solidarizarte con él"

Todo esto me vino a la cabeza mientras veía cómo, Vettel primero y Hamilton después, doblaban al asturiano en una de sus carreras más frustrantes desde que está en McLaren Honda (y eso que ha tenido muchas). Volvimos a escuchar esos mensajes de radio en los que no te queda otra que solidarizarte con él. "No he corrido con tan poca potencia en mi vida", se le escuchaba después de que Palmer y Kvyat, a los que tenía muy atrás, se lo merendasen al final de recta. ¡Y todo este sufrimiento, para terminar abandonando, por tercera carrera consecutiva, por culpa de un motor que estaba estrenando!

Qué injusta es la vida. Vettel y Hamilton, sus dos grandes rivales dentro del paddock, ésos con los que él debería estar peleando el Mundial, doblándole en busca de la victoria. A mí, lo siento, esta escena me entristeció mucho. Porque yo soy una apasionada de este deporte y nada me gustaría más que ver a los tres mejores pilotos de la parrilla disputando rueda con rueda el campeonato. Ganaría el deporte en general, la Fórmula 1 en particular y, sobre todo, nosotros.

Fernando Alonso, McLaren MCL32

Foto: LAT Images

Pero no, lo que tenemos es a un piloto como Alonso, en un monoplaza que lleva tres años sumido en la nada. Que no ha dado ese pasito de calidad que se presuponía, sino más bien todo lo contrario, va para atrás. De ahí que McLaren Honda le haya dado el caramelo de la Indy 500, aunque eso implique perderse el Gran Premio de Mónaco. Porque saben que no pueden tener a un campeón como Fernando sumido en la miseria un año más.

Qué quieren qué les diga, quienes critican su decisión es que no se han puesto en su lugar. Un piloto con su talento, no debería estar peleando con un Sauber. Con todos mis respetos. No tendría que ver cómo le doblan Vettel y Hamilton, sino luchar contra ellos. No tendría que abandonar carrera sí, carrera también, siempre por fallos mecánicos. No tendría por qué perderse el Gran Premio de Mónaco para correr otra competición. Eso no sucedería si pudiera competir por algo en F1. Pero tal y como están las cosas, la Indy es lo mejor que le puede pasar este año a Alonso.