¿Por qué no pudo rodar la F1 en Nürburgring? La explicación

La Fórmula 1 no ha podido disputar el viernes del Gran Premio de Eifel a causa de la lluvia y la niebla.

Las precipitaciones que amenazaron toda la semana al evento aparecieron desde la primera jornada, pero no fueron suficientemente fuertes para que los coches, equipados con los neumáticos de lluvia de Pirelli (azules y verdes) pudieran rodar.

Sin embargo, la FIA tiene un requisito indispensable para la disputa de cualquier sesión en pista: que el helicóptero médico pueda volar al hospital más cercano, pero no a cualquiera, sino a uno que cuente con capacidad de ejercer neurocirugía. El reglamento obliga a que cualquier medio de transporte –si es el helicóptero, por aire, si es una ambulancia, por carretera– pueda llegar a un hospital así en caso de accidente en menos de 20 minutos.

En Nürburgring, la televisión mostró un helicóptero sobrevolando el circuito, y pronto surgió la duda entre los aficionados de por qué entonces el de la F1 no podría volar. El director de carrera de la categoría, Michael Masi, se apresuró a aclararlo en declaraciones a Sky Alemania: "El clima y la humedad están bien. Es solo que el helicóptero médico no puede volar al hospital debido a la niebla".

"Tenemos al helicóptero de retransmisión que está volando solo alrededor del circuito, pero ir de aquí a cualquiera de los hospitales, si pasase algo, no es posible. Y por lo tanto, desde una perspectiva de seguridad, no podemos disputar la sesión".

El helicóptero médico también habría podido volar sobre el trazado, como el de retransmisión, pero no ir más allá de esa zona, que se encuentra entre las montañas de Eifel, donde la niebla y la lluvia dificultan la visión.

"Hemos estado trabajando con el control de tráfico aéreo local y con el piloto del helicóptero, pero las condiciones climáticas únicas de la región de Eifel no ayudaron".

La F1 asegura estudiar un plan 'B' por si el resto del fin de semana ocurre lo mismo.

En China 2017 se dio una situación parecida, el hospital designado por la FIA estaba a más de 20 minutos por carretera y el helicóptero médico no podía volar. La solución fue, para el día siguiente, asegurarse de que un hospital más cercano, accesible en poco tiempo por carretera, fuera 'actualizado' y equipado para poder ejercer neurocirugía.