Los equipos critican las formas de la FIA con la medida antiporpoising

Los equipos de Fórmula 1 estaban camino de Montreal cuando la FIA emitió una directiva técnica en la que explicaban cómo pretendían resolver las preocupaciones sobre la seguridad que los pilotos habían manifestado sobre el rebote de sus coches.

La medida ha consistido en establecer una métrica que fije un límite sobre la intensidad de las oscilaciones verticales, obligando a los equipos a levantar sus coches en caso de no cumplirlo, y también permitió que se hicieran modificaciones en los suelos ya para el fin de semana de Canadá.

Únicamente Mercedes pudo responder a esta última opción, instalando un segundo tirante para los entrenamientos del viernes. Sin embargo, este fue retirado el sábado en medio de amenazas de una protesta por parte del resto de equipos después de que se cuestionara si la FIA había seguido los procedimientos correctos.

La situación provocó un enfrentamiento entre el jefe de Mercedes, Toto Wolff, y los directores de los equipos rivales en una reunión celebrada el sábado por la mañana, y el austriaco posteriormente acusó a los demás de comportarse de forma "lamentable".

Pero Wolff no es el único que piensa que la FIA podría haber manejado mejor la situación, y algunos no están contentos con la forma en que las cosas se precipitaron en la víspera de un fin de semana de gran premio.

El jefe de Aston Martin, Mike Krack, dijo: "Creo que el momento de la directiva técnica no fue precisamente ideal, porque tienes a todo el equipo viajando, y todo está en el sitio [al que vas]". 

"Puedes reaccionar, pero tienes que estar muy seguro de lo que haces o tienes que saber de antemano lo que hará esto. Así que creo que, en una situación así, hay que adoptar un enfoque conservador y buscar soluciones para la siguiente carrera. El momento [de la intervención] podría haber sido mejor".

El director de AlphaTauri, Franz Tost, se mostró de acuerdo con Krack: "El momento no fue bueno en absoluto, porque la mayoría de la gente estaba viajando. Y enviar una directiva técnica unos días antes de la carrera no es, sin duda, lo mejor".

Otmar Szafnauer, jefe de Alpine, dijo que informar a los equipos un jueves significaba que cualquier escudería que no hubiera preparado ya algo para reforzar su fondo plano, quedaba en potencial desventaja.

"Creo que no es justo para el resto que no pudo traer un tirante extra, por ejemplo", dijo.

"Así que tenemos que tener cuidado de no cambiar las reglas del juego a mitad de temporada".

Varios jefes de equipo también han cuestionado si el plan general de la FIA es el correcto, ya que la métrica oscilante parece un elemento increíblemente complejo de gestionar y vigilar.

El jefe de Alfa Romeo, Fred Vasseur, también ofreció su opinión: "No estoy seguro de que introducir una nueva directiva técnica sea la forma correcta de hacerlo, sinceramente". 

"Volveremos a tener cosas nuevas que gestionar, vigilar, controlar y para complicar de nuevo el reglamento". 

"Creo que algunos coches son rápidos con el rebote, como el Ferrari, y algunos equipos fueron capaces de solucionarlo, como Red Bull, pero depende del equipo decidir hacia dónde quieren ir".

Szafnauer añadió que todos los equipos tienen la opción de deshacerse del porpoising inmediatamente, simplemente elevando la altura de la carrocería.

"Nos enfrentamos exactamente a las mismas dificultades para correr con estos coches que todos los demás", explicó.

"Y tendemos a llevar el coche a una altura de pilotaje que siga obteniendo el rendimiento que necesitamos, pero que no lesione o haga daño a los pilotos ni destruya el coche. Lo hacemos de forma segura".

"Creo que todos los equipos tienen esa oportunidad de hacerlo. Solo hay que aumentar la altura de la carrocería. Será seguro y no hay que hacer nada más. Simplemente es que algunos deciden no hacerlo y presionan a la FIA para que haga cambios".