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¿Cómo fue la trayectoria de Toto Wolff como piloto?

Mucho antes de convertirse en jefe de Mercedes en Fórmula 1, Toto Wolff tuvo una carrera como piloto sin el éxito que hubiera deseado. Conoce cómo fue y cuándo se dio cuenta que no llegaría a la élite.

Totto Wolff, Ferrari 575 M Maranello

Totto Wolff, Ferrari 575 M Maranello

LAT Images

Torger Christian "Toto" Wolff nació el 12 de enero de 1972 en Viena (Austria), y allí pasó sus primeros años de vida. De madre polaca y padre rumano, el actual jefe de Mercedes se crió en una familia humilde, con no demasiados recursos económicos, y la situación se agravó cuando diagnosticaron un tumor cerebral a su padre. Por aquel entonces, el pequeño Toto tenía 8 años.

Su amor por las carreras llegó de forma bastante inesperada, como explicó Wolff a Sky Sports: "Fue pura coincidencia. Había visitado Ámsterdam con unos amigos, no preguntes por qué, y en el viaje de vuelta pasamos por Nürburgring".

"Uno de mis mejores amigos corría en el campeonato alemán de Fórmula 3", reveló. "Me fascinó el paisaje, me encantaron los coches y los pilotos, y decidí que quería arriesgarme. Investigué un poco y decidí comprar un Seat Ibiza con mis ahorros y un pequeño préstamo. Cada mes me las arreglaba para pagar el crédito, y empecé a correr. Vendí mi coche de calle y conduje el de carreras en la pista y en las carreteras públicas, así es como empezó mi trayectoria".

Toto Wolff

Conducción nocturna para hacer kilómetros

El entusiasmo y el compromiso no faltaron, pero Wolff no era el mayor talento austriaco: "Mi primera carrera fue la Copa Seat Ibiza. Treinta competidores y yo dije: 'Voy a entrar y les voy a ganar a todos, seguro'. En la primera sesión de clasificación terminé decimoctavo".

"Me dijeron que, obviamente, era porque el motor necesita 1.000 kilómetros para rendir al máximo, y el mío era nuevo", recordó Toto. "Eso fue en Spielberg, en el actual Red Bull Ring. Así que conduje mi Seat toda la noche hasta llegar a los 1.000 kilómetros, volví y empecé la siguiente clasificación".

"Otra vez 18°. Entonces me di cuenta de que hacía falta más de lo que esperaba. Después, hice un curso serio de carreras, me adentré en la Fórmula Ford, y las cosas mejoraron a partir de entonces".

En 1992 Wolff debutó en la Fórmula Ford de su país, y pilotó tres temporadas en Alemania y Austria en la categoría junior. En 1994, triunfó en su categoría en las emblemáticas 24 Horas de Nürburgring. Para financiar su vida como piloto, y para ganar aún más experiencia, empezó a trabajar como instructor en el circuito de Spielberg.

Lee más sobre Mercedes en la temporada 2022 de Fórmula 1:

"Fue duro porque no tenía apoyo económico de casa", indicó el miembro de Mercedes. "Recibí una oferta del mejor equipo de Fórmula Ford de la época para trabajar como instructor en el antiguo circuito de Spielberg".

"Había una granja cercana en la que pagaba uno o dos euros al día por el alojamiento y el desayuno. Lo mejor de mi trabajo era que no solo enseñaba a los niños a conducir, sino que también podía hacer el shakedown de los coches por la mañana y conducirlos por la tarde. Eso me dio mucha experiencia que sería valiosa para mis propias carreras".

Toto Wolff, Mercedes 190 E DTM Evo

La realidad que le mostró Alex Wurz

A pesar de esa experiencia, nunca llegó a la cima en las categorías formativas, en gran medida por su compatriota Alexander Wurz.

"Sí, él fue el responsable de que pensara en hacer otra cosa con mi vida. Probablemente ni siquiera lo sepa. El antiguo Österreichring tenía una curva muy rápida, la Bosch Kurve, que iba cuesta abajo. Con un Fórmula Ford te deslizabas por esa curva sobre las cuatro ruedas".

"Él tenía ese control, yo no. Me perdí la experiencia del karting, las posibilidades y los kilómetros de prueba por falta de presupuesto. En ese momento pensé: 'No voy a llegar a la cima'".

Al final llegó a la cúspide del automovilismo, pero desde el muro de boxes en lugar del habitáculo del piloto. En 2009 compró acciones del equipo Williams de Fórmula 1, para unirse al equipo oficial de Mercedes cuatro años después. Bajo su dirección, la escudería se convirtió en la más dominante de la historia del Gran Circo.

En los años posteriores siguió compitiendo ocasionalmente como piloto con cierto éxito, incluso en el Campeonato de GT de la FIA y en el Campeonato de Rally de Austria.

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