¿Es la caja de cambios el motivo por el que aparece el porpoising en F1?
Los equipos de Fórmula 1 continúan investigando por qué pierden tiempo con el efecto porpoising en 2022, y un motivo podría ser la caja de cambios.
La nueva era de la Fórmula 1 significó un radical cambio de reglamento para la temporada 2022, con el único objetivo de hacer que los monoplazas puedan dar mayor espectáculo sobre la pista.
Desde las pruebas invernales, los equipos estuvieron investigando sobre el comportamiento de los coches en el trazado de Barcelona-Catalunya, y allí descubrieron algo que iba a cambiar por completo el enfoque del presente curso.
En la recta principal del circuito catalán, los nuevos coches con efecto suelo, que regresaba al Gran Circo después de que fuera prohibido en la década de 1980 por seguridad, experimentaban un movimiento de rebote cuando alcanzaban su velocidad máxima, el conocido porpoising.
Algunas escuderías sufrían más que otras, como Ferrari, que protagonizaron una esperpéntica imagen con Charles Leclerc oscilando la cabeza hacia arriba y abajo sin control mientras que buscaba el punto de referencia de la frenada.
En la segunda semana de pruebas, muchos lograron resolver parte de esto, pero la gran mayoría seguía sufriendo con el porpoising, como Mercedes, que ha pasado de ser el rival a batir a un conjunto de media tabla que pelea por ser el mejor del resto.
Con el paso de los grandes premios, el efecto rebote ha ido incrementando y disminuyendo en según qué escuderías a medida que introducían actualizaciones, y la prueba de Australia fue un punto de inflexión en el que se pudo investigar más a fondo sobre el porpoising.
Ferrari dominó en Albert Park a pesar de que su F1-75 sigue teniendo este movimiento en las rectas, pero el W13 de Mercedes no es capaz de alcanzar el rendimiento deseado por este efecto.
¿Qué hace que los italianos puedan ganar mientras que los alemanes sufren sin solución?
La principal diferencia es que las flechas de plata acusan el porpoising a partir de una velocidad más baja que los de Maranello, por lo que deben elevar la altura de su coche, lo que se traduce en una menor carga aerodinámica en las curvas, además de restar punta en los tramos con el acelerador a fondo.
Así pues, el efecto rebote no es el principal problema de Mercedes, sino que es la cantidad de carga aerodinámica que son capaces de poner en su monoplaza para equilibrar el molesto porpoising que deja sin visibilidad a Lewis Hamilton y George Russell.
Buscando el por qué de esto, hay un aspecto técnico que destaca, y no es otro que la disposición de los elementos en cada coche de Fórmula 1. Los equipos motorizados por el fabricante alemán, Mercedes, McLaren, Aston Martin y Williams están lejos del ritmo de carrera de los líderes, y revisando los datos se puede apreciar que la pérdida media en las rectas es de una décima y media por giro.
Por ello, la unidad de potencia no es el principal problema en Brackley, sino que es la aerodinámica. Esta teoría se refuerza aún más con las cifras de quienes llevan una caja de cambios de los alemanes, ya que la longitud de este elemento en los coches de Mercedes, Aston Martin y Williams provocan que las túneles Venturi y las tomas de aire del fondo empiecen más atrás que en otros coches.
Esto maximiza la distancia entre los neumáticos y los pontones, quienes deberían equilibrar la aerodinámica del monoplaza, además de la distancia entre ejes, clave en la Fórmula 1 de 2022.
Para mantenerse dentro de los límites, Ferrari y Haas, que comparten motor y caja de cambios, tienen unos pontones más adelantados, por lo que parte de su refrigeración parte desde ahí, y permite que la carrocería en la sección posterior acabe antes, de una forma más estilizada.
Red Bull y AlphaTauri siguen la línea de los de Maranello, con una transmisión que permite un diseño que beneficie evitar el porpoising.
Un coche más ancho en la parte trasera podría contribuir a la restricción del flujo en el fondo, haciendo que los túneles Venturi sean más resistentes a las pérdidas, pero hay que contar con el centro de gravedad del coche a la hora de estudiar el efecto rebote.
Una caja de cambios más corta puede hacer que el centro de gravedad esté en una posición incómoda en relación con el fondo del monoplaza, pero solo son conjeturas que los ingenieros puede solucionar.
La Fórmula 1 es una categoría donde se reúnen las mejores mentes el panorama automovilístico, y no sería raro que encontraran soluciones completamente radicales en un corto periodo de tiempo.
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