¿Qué causó la pesadilla de Ferrari F1 en Francia?

Ni Leclerc ni Carlos Sainz fueron capaces de mantener sus neumáticos lo suficientemente vivos como para igualar los tiempos de sus rivales, y la caída de su ritmo y la necesidad de paradas adicionales les hizo quedar fuera del top 10.

Pero aunque Ferrari no fue el único que sufrió más degradación de la esperada en el GP de Francia, al equipo de Maranello definitivamente le fueron las cosas mucho peor que a sus rivales.

Y eso ha dejado a la escudería buscando respuestas a por qué su coche SF21, que había conseguido la pole position en Mónaco y Bakú, se quedó sufriendo en la parte trasera de la mitad de la parrilla.

La raíz del problema de degradación de los neumáticos de Ferrari parece girar en torno a la gestión de sus gomas delanteras.

El equipo ha descubierto que los delanteros del SF21 tienden a calentarse rápidamente y funcionan en una ventana de temperatura muy estrecha.

Esta característica puede ser muy buena para una vuelta de clasificación, especialmente en circuitos de baja velocidad como Mónaco y Bakú, donde el calentamiento de los neumáticos es un factor importante.

Sin embargo, en una carrera larga, en la que las temperaturas de los neumáticos aumentan constantemente, significa que pueden desencadenar problemas.

Es un rasgo que hemos visto durante toda la temporada, en la que Ferrari ha demostrado ser rápido en la clasificación, pero no siempre ha conseguido transformarlo en ritmo de carrera.

Sainz dijo después de la carrera de Paul Ricard: "Ha sido una tendencia, y no voy a mentir. Es algo que hemos tenido en mente en cada carrera. Sabemos que tendemos a sufrir un poco más en las carreras que en la clasificación. Pero debo decir que también ha habido un par de fines de semana este año en los que este problema no ha aparecido".

"Por ejemplo, en Barcelona el ritmo de carrera no fue un problema. También está claro que tenemos una ventana muy estrecha de rango de funcionamiento en nuestros neumáticos delanteros, por lo que tendemos a sufrir mucho más con el graining o con el desgaste delantero que nuestros rivales".

"Así que ahora se trata de entender por qué tenemos esta ventana tan estrecha, y por qué sufrimos más con este neumático delantero en comparación con los demás".

Carlos Sainz Jr., Ferrari SF21, Charles Leclerc, Ferrari SF21

Varios factores entraron en juego para que las circunstancias del GP de Francia fueran tan duras para Ferrari.

Al ser una pista con curvas de mayor velocidad, Paul Ricard hace pasar más energía por los neumáticos que lugares como Mónaco y Bakú, por lo que mantener la temperatura de los neumáticos bajo control es más difícil.

Además, la lluvia que cayó el sábado por la noche y el domingo por la mañana se llevó gran parte de la goma que habían puesto los coches al principio del fin de semana.

Esto significó que la superficie de la pista "verde" para la carrera tenía mucho menos agarre, lo que siempre es un factor que provoca una degradación más alta de lo normal, además del graining, ya que los coches derrapan más. Sainz lo experimentó de primera mano cuando se salió de la pista de camino a la parrilla.

El problema de Ferrari con los neumáticos delanteros también parece ser algo que no se puede erradicar con simples cambios de configuración.

El director del equipo, Mattia Binotto, cree que la solución es algo que solo se puede resolver a medio y largo plazo, con algunos ajustes importantes en los componentes del coche.

"¿Podemos solucionarlo con una simple actualización en el coche actual? Creo que podemos mejorar la situación, pero para solucionarlo, creo que necesitamos algún cambio de hardware, como por ejemplo las llantas, que no es posible [debido al] reglamento", dijo.

"Creo que es más importante para nosotros en esta etapa tratar de entenderlo y solucionarlo para el próximo año. Creo que este problema puede volver a ocurrir en algunas carreras, pero no en todos los circuitos. Está relacionado con la pista y las condiciones meteorológicas, pero tenemos que prepararnos para afrontar estas situaciones en el futuro y al menos intentar mitigar el problema, ya que volverá a ocurrir."

Charles Leclerc, Ferrari SF21

La referencia a las llantas es especialmente interesante, ya que confirma el problema de Ferrari con el sobrecalentamiento de sus neumáticos delanteros.

Las llantas modernas, que han sido homologadas para este año y que solo pueden ser modificadas utilizando tokens, son increíblemente complejas y los equipos las utilizan tanto por su efecto aerodinámico como por el flujo de aire para ayudar a gestionar mejor las temperaturas de los neumáticos.

En el caso de Ferrari, puede ser que hayan ido demasiado lejos tratando de obtener mejoras aerodinámicas por encima de la extracción de calor, lo que significa que la llanta, y por lo tanto los neumáticos, se están calentando más de lo que el equipo desearía.

Pero aunque Ferrari sabe lo que salió mal en Francia, ahora se enfrenta a unos días intensos para averiguar por qué todo resultó tan desastroso y cómo evitar que la situación se repita.

Binotto dijo después de la carrera: "Tenemos que volver, analizar los datos, hacer una lluvia de ideas y realizar algunas simulaciones. Creo que eso formará parte de los deberes que tenemos que hacer".

Pero sabe que garantizar que esta situación no se presentará en el GP de Estiria este próximo fin de semana será demasiado pedir.