Alonso-Vettel, un duelo de época que renacerá en la F1 2021

La etapa de Fernando Alonso en Ferrari comenzó de la mejor manera allá por 2010, ganando en el GP de Bahrein que abría la temporada y que le colocaba, a las primeras de cambio, líder del mundial.

El asturiano había logrado así igualar el debut de rojo de Kimi Raikkonen, que en 2007 también se había estrenado con triunfo, y había sumado la segunda victoria de Ferrari en 18 carreras, tras un 2009 amargo.

Ganador de la carrera

Alonso reforzó su impresionante primera aparición con una temporada muy buena, pero como sabemos, el piloto y Ferrari sufrieron un final de año de auténtica pesadilla en Abu Dhabi, donde se vieron atascados detrás del Renault de Vitaly Petrov y perdieron el título ante Sebastian Vettel y Red Bull.

La rivalidad entre Vettel y Alonso fue intensa a lo largo de aquel año en el que se coronó por primera vez el alemán, y las cosas casi cambiaron el rumbo del español nuevamente en 2012, cuando tras un toque en el inicio de la última carrera en Brasil, Vettel se las arregló para remontar hasta la posición que necesitaba pese a tener el coche dañado.

Siempre hubo cierto elemento de fricción entre ellos, y se puede decir que el primer roce se remonta a otra carrera crítica para el campeonato de 2007, cuando Vettel no había ni completado una temporada. En unas condiciones horribles bajo la lluvia en Fuji, Alonso estaba tratando desesperadamente de mantenerse cerca del piloto de McLaren (y a posteriori líder y campeón) Lewis Hamilton.

El rocío que dejaban los coches era cegador, los espejos se empañaban y Alonso se precipitó al adelantar a Vettel. Se tocó con el Toro Rosso y trompeó, y aunque pudo seguir, luego se saldría de pista y abandonaría, tal vez por las consecuencias del impacto previo. Hamilton ganó y Vettel arruinó su propia gran carrera con un bochornoso accidente con Mark Webber durante Safety Car.

Accidente de Sebastian Vettel, Toro Rosso STR02, y Mark Webber, Red Bull Racing RB3

Ese día fue el comienzo del duelo Alonso / Vettel y el futuro puede dejar nuevos episodios. En 2021, ambos pueden volver a encontrarse a menudo, aunque desafortunadamente no luchando por la primera posición, sino en equipos punteros de la zona media de la parrilla.

Alonso parece volver a la F1 en su mejor momento pese a lo que dice el DNI, y el ex jefe de su nuevo equipo Alpine (antes Renault), Cyril Abiteboul, le comparó con un "tiburón hambriento" que huele sangre. Por el contrario, Vettel pasó 2020 actuando como un caballo de carreras cansado, incapaz de seguir el ritmo de su compañero de Ferrari Charles Leclerc y deseando que el tiempo pasara rápido.

Racing Point / Aston Martin le dará más paz y parece el lugar idóneo para que se reencuentre, y el germano parece totalmente motivado césped más verde, pero ¿Vettel todavía tiene el impulso para volver a motivarse e ir rueda a rueda con Alonso el próximo año?

¿Volverá el Vettel original? Las claves

Vettel tuvo un gran acierto nada más llegar a la Fórmula 1 al vincularse con el especialista en alto rendimiento Aki Hintsa. A Hintsa, que trabajó con el brillante atleta Haile Gebrselassie (recordman mundial de maratón), lo llevó a la F1 Mika Hakkinen, y cuando Vettel lo conoció en 2006, tenía una gran reputación.

Vettel hizo ese 'clic' con Aki instantáneamente y comenzó a adoptar sus ideas. Intensificó su entrenamiento físico y, cuando subió a Red Bull, unió fuerzas con uno de los entrenadores personales de Hintsa, Tommi Parmakoski, con quien desarrolló un vínculo intenso.

El éxito fluyó rápidamente en Red Bull. En un capítulo del libro The Core (escrito por Aki Hintsa y Oskari Saari), Tommi declaró en 2014: "En mi opinión, la razón principal del éxito de Sebastian ha sido su capacidad excepcional para construir un equipo brillante a su alrededor. Todos en la fábrica quieren hacer un buen coche... es importante para él rodearse de personas que lo apoyen y animen en el momento adecuado y le alienten cuando las cosas no salgan según lo planeado".

Quizás los primeros años de Vettel en Ferrari tuvieron algo de eso, pero el equipo italiano tiene una naturaleza tan política que aquello no podría durar mucho. Vettel fichó por la Scuderia con Marco Mattiacci, que fue reemplazado por Maurizio Arrivabene antes de que Seb siquiera se estrenara al volante de un coche rojo. Arrivabene salió de Ferrari después de la temporada 2018 dejando a Mattia Binotto tomar las riendas.

La escudería pasó a centrarse en Charles Leclerc desde 2019, en parte comprensible por sus buenas actuaciones, pero esa falta de apoyo ha afectado mucho a Vettel y no hemos visto al mismo piloto que dominó a principios de la década anterior.

Las cosas pueden cambiar en Aston Martin. El director técnico Andrew Green cree que el equipo tiene la infraestructura para ayudar a Vettel: "Estamos muy centrados en los pilotos. Nos tomamos mucho tiempo para entender a nuestros pilotos y trabajar con ellos, formamos una relación y un vínculo muy fuertes con ellos... dejamos a un lado toda política y eso les permite concentrarse en conducir el coche lo más rápido posible. Creo que podemos devolver a Seb da su mejor versión".

Si la química funciona, es posible que veamos un resurgimiento del Vettel original, a pesar de que su gran influencia, Aki Hintsa, falleció tristemente en 2016. Alonso podría reencontrarse luchando de nuevo con su antiguo némesis. La carrera para ser 'el mejor del resto' detrás de Mercedes y Red Bull promete ser bastante emocionante en 2021.

Aston Martin, Alpine, McLaren y probablemente Ferrari pelearán en el mismo espacio. Mientras Hamilton, Bottas y Verstappen (¿y Pérez?) se reparten las victorias, la intensidad de lo que pase detrás podría ser fascinante.

Así que... una idea: entreguemos un segundo título de campeón del mundo al piloto que lidere esa batalla en la zona media. Hagamos una categoría separada. Al fin y al cabo, quien se imponga entre tanto talento y con equipos a priori igualados reforzará su imagen, aunque no le hace en absoluto falta a dos pilotos que suman seis mundiales y aún seguirán dando guerra once años después. ¡Que empiece ya!