Alonso: "Es una pena, pero soy afortunado"

Tras la salida, Alonso comenzó a rodar en la décima plaza, con un ritmo inferior a los pilotos de delante y ralentizando el de sus más inmediatos perseguidores.

Después de su primera parada, el español era 13º, cuando un toque con Esteban Gutiérrez acabó en un fortísimo accidente que hizo volar y volcar al McLaren.

Tras pasar por el centro médico, atendió a los medios: "Me duele un poco todo. Se mueve todo en el cuerpo cuando vas a esa velocidad. Me duele un poco la rodilla, pero a parte de eso todo perfecto, y soy muy afortunado.

Estoy contento de estar hablando ante vosotros, porque cuando vas a más de 300 km/h te juegas la vida. Si en una de esas vueltas que he dado coincide mal el golpe igual tienes un problema serio. Así que agradecido y con ganas de que pase rápido este fin de semana y volver a subirme al coche".

El bicampeón narró así el accidente:  "Íbamos muy juntos. Cogí el rebufo todo lo que pude, y movimientos tan fuertes y tan cerca de la frenada son siempre un peligro. Ir tan cerca me hizo perder la referencia de la frenada, perdí el punto de frenada y frené demasiado tarde. Me lo llevé por delante. Cuando estás tan cerca y llegas a 310 o 315 km/h puede pasar eso. Lo bueno es que los dos estamos bien"

En 2015, Alonso no pudo comenzar la temporada por lesión. En esta ocasión sí estuvo en Australia, pero no alcanzó las 20 vueltas. No obstante, las sensaciones son más positivas que entonces, aunque lamenta la mala suerte: "Estoy un poco decepcionado por no acabar la carrera. El destrozo del coche es grande y habremos perdido una unidad de potencia y pondremos la segunda rápidamente. Es es una pena después de un buen fin de semana no poder acabarlo con algún punto".