Las consecuencias para Haas del accidente de Mick Schumacher

El accidente de Mick Schumacher en Mónaco está siendo analizado por la FIA, para así intentar entender por qué el Haas se ha partido en dos por segunda vez esta temporada. Mientras tanto, en el equipo americano, han hecho balance de daños.

A pesar de que, en un principio, parecía que una gran parte del monoplaza no iba a ser fácilmente reparado, los ingenieros dirigidos por Simone Resta se han encontrado con piezas que todavía pueden ser útiles.

La carrocería ha sido sustituida, pero se ha empezado a trabajar sobre la dañada, y estaría disponible como extra para Bakú. El motor Ferrari no ha sufrido daños y lo único que han tenido que sustituir ha sido la caja de cambios externa, un resultado bastante inesperado teniendo en cuenta la magnitud del accidente.

El choque ocurrió como consecuencia de la pérdida de control del monoplaza por parte de Schumacher a la salida de la primera chicane de la Piscina, tras lo cual se estrelló contra las barreras del interior, arruinando la parte delantera deformable, y no pudo evitar estrellarse en la entrada de la segunda chicane. 

El impacto, afortunadamente, no fue devastador, sino que estuvo en la línea del sufrido por Daniel Ricciardo en los entrenamientos del viernes, pero la dinámica del choque en un ángulo diferente con respecto a las barreras Tecpro hizo que el Haas se partiera en dos.

El Haas VF-22 de Mick Schumacher, partido en dos durante el GP de Mónaco

Ver la parte trasera del monoplaza, donde se aloja la caja de cambios, dando vueltas a su libre albedrío por la pista causó una gran impresión, especialmente en el momento en el que todavía no se sabía que Mick estaba ileso, protegido por la sólida carrocería construida por Dallara en Varano de' Melegari. 

Es la segunda vez en esta campaña que el hijo del Káiser se ve envuelto en un accidente grave. Schumacher también se estrelló en Yeda, a una velocidad bastante mayor que en Mónaco, pero también logró salir ileso del impacto, prueba de los avances en materia de seguridad que se han hecho en la categoría. 

El Haas de Mick Schumacher tras su accidente en el GP de Arabia Saudí

Pero, ¿es lícito preguntarse si existe una debilidad estructural si un coche de F1 choca contra las barreras en un determinado ángulo y, tal vez, la protección actúa como una palanca? La FIA y los miembros de la Comisión de Seguridad estudian los accidentes para evaluar científicamente sus causas y efectos.

Los monoplazas de 2022, por reglamento, solo pueden tener dos acoplamientos de la caja de cambios al motor (dos en la parte superior de la caja y dos en la inferior). Recordemos que tanto el motor como la caja de cambios forman parte del suministro que Ferrari asegura al equipo de Guenther Steiner, por lo que la avería ocurrida en Montecarlo también afectó al personal técnico del Cavallino Rampante.

El accidente de Mick Schumacher en Mónaco

Ver un tren trasero deambulando por la pista no es, desde luego, seguro, por lo que se evaluarán cuidadosamente todos los aspectos del fallo, pero es interesante observar que el Haas VF-22 salió airoso de un impacto como el que sufrió en las calles del Principado.

Teniendo en cuenta lo que se podía ver, era fácil prever la sustitución del chasis, el motor y la caja de cambios, algo que habría hecho una gran mella en los costes de Haas, que se enfrenta al límite de presupuesto.

En realidad, el accidente fue, afortunadamente, más espectacular que grave, y se ha podido resolver con la sustitución de la carrocería y la parte exterior de la caja de cambios. 

El motor y caja de cambios de Ferrari en el Haas VF-22

Los técnicos dirigidos por Simone Resta han decidido preparar el chasis de repuesto para Bakú, ya que el que se estrelló requería trabajos de reparación, pero estará disponible como tercera carrocería para el viaje a Azerbaiyán.

Por lo tanto, no se produjeron daños irreparables en el chasis, e incluso la unidad de potencia, la Ferrari 066/7, salió indemne del accidente: la única parte de los elementos estructurales que no se pudo salvar fue la caja de cambios externa, pero por muy impresionante que fuera el accidente de Mick Schumacher, el coche de Haas salió más que bien parado.