Las diferentes sensaciones del simracing y las carreras reales
Los pilotos reales utilizan los simuladores para entrenar, incluso compiten con videojuegos, pero ¿cuáles son las principales diferencias que encuentran en el mundo virtual?
Fernando Alonso, McLaren, tiene una carrera en un simulador de conducción como parte del proyecto Wo
Andrew Hone / Motorsport Images
El simracing está viviendo momentos de esplendor estos meses ante la imposibilidad de aficionados y pilotos de pisar circuitos reales, y la alta competitividad de los especialistas ya se ha dejado ver en enfrentamientos directos con estrellas de la Fórmula 1 y otras categorías.
El nivel de realismo de los simuladores/videojuegos actuales ha alcanzado cotas nunca vistas anteriormente, y son capaces de recrear superficies, puntos de referencia e incluso el engomado del asfalto a medida que pasan las vueltas de manera bastante precisa.
No obstante, los pilotos reales tienen claro que, por el momento, no compensa las sensaciones que se viven en un coche de carreras propiamente dicho y señalan a Motorsport.com varias diferencias como claves a la hora de ponerse al volante del cockpit en el salón de casa.
"Evidentemente, la similitudes son que los simuladores top de la actualidad escanean a la perfección los circuitos, no se pierden el mínimo detalle y esto ayuda a conocerlos, a adaptarte a una pista cuando no has estado en ella desde hace tiempo: referencias de frenada, puntos de adelantamiento... además se puede entrenar la resistencia haciendo relevos largos para practicar tu concentración, no cometer ningún error, marcándote un tiempo objetivo para ser constante. La regularidad en el motorsport es casi más importante que ser el más rápido", asegura Lucas Ordoñez, que sabe lo que es correr en Le Mans y por medio mundo después de 10 años con Nissan Motorsport.
"Luego ya está el factor riesgo y la fuerza lateral, que ahí el simulador no lo puede transmitir, porque te guías solamente por la sensación que te transmite el volante y la pantalla. En la realidad conduces con el trasero, como decimos, que te transmite todas las sensaciones del asfalto a través de los neumáticos".
Carlos Sainz, piloto de McLaren en Fórmula 1, deja claro que para él la adrenalina, la velocidad o las fuerzas G "son imposibles de simular en el sofá de casa", a pesar de la gran evolución de los videojuegos de carreras en los últimos 10 años.
"Las diferencias son infinitas. Asiento, cinturones, volante, etc. Y lo más importante, ¡cuatro ruedas y un motor de casi 1.000 CV a tu espalda! Creo que es importante no perder la noción de lo que es un juego y lo que es subirse a un coche de verdad, y en especial subirse a un F1", reconoce a Motorsport.com.
"La adrenalina, el riesgo, la velocidad o las fuerzas G son cosas imposibles de simular en el sofá de casa. Dicho eso, un juego como Gran Turismo Sport, con ese detalle de gráficos, la exactitud de los trazados y todos los cambios de reglajes que se le pueden meter al coche, ha subido el nivel de los simuladores en casa y son juegos que te exigen mucha habilidad si quieres ser competitivo en una carrera online. A mi cada vez me engancha más y me divierte el gusanillo de competir y jugar contra algunos de los mejores pilotos de simracing".
Dani Juncadella, que sabe lo que es ganar en Macao, en el DTM y en la Fórmula 3 europea, es el piloto español que está compitiendo estos meses al máximo nivel de campeonatos virtuales, y también coincide en que es complicado "compensar" la falta de fuerzas G.
"Es difícil de compensar. Hay dos cosas que faltan en los simuladores que van a ser difíciles de compensar: una es el movimiento, que si queremos tener algo real, parecido a los de F1, la inversión es demasiado grande para que tenga sentido. Y luego la adrenalina de ir dentro de un coche. La realidad virtual creo que soluciona esto en parte porque te lo hace más real e inversivo, que sientes más la velocidad. Pero aún está en fase de desarrollo y yo no lo uso aún", reconoce.
"Una gran parte es diversión, entretenimiento, eso no hay duda. Pero por otro lado, lo parecido que es a la realidad en cuanto a la competitividad y el perfeccionismo… entrenar todas esas cosas no te lo da nada que no sea un simulador. Eso a mí me aporta mucho. A nivel mental es una muy buena preparación, porque en las carreras la igualdad es máxima, entonces cómo gestionar todo eso para mí es clave, es lo que me sirve para prepararme mejor".
Cuando se les pregunta por los alicientes de ponerse a competir online contra otros pilotos o simracers, Juncadella lo tiene claro: buscar la perfección.
"Hay otros alicientes, porque no es peligroso, no hay el factor de adrenalina, pero sí que el factor de igualdad y de perfeccionismo son claves. En iRacing la vuelta perfecta puede llegar a existir porque puedes resetear, volver al box y salir en las mismas conducciones y así una y otra vez. Al final la conducción es más de memoria muscular, que de dar vueltas y vueltas vas encontrando trucos y mejoras. Eso lo hace que sea mucho más profesional y es otro tipo de competición", apunta.
Esteban Gutiérrez, piloto de desarrollo de Mercedes en Fórmula 1, se ha iniciado en el simracing en las últimas semanas y el mexicano coincide en que el "estrés físico" junto a las fuerzas laterales y el riesgo es algo que no se tiene en un simulador/videojuego, pero asegura que sí sufres en cierta manera un "estrés mental" parecido al real.
"En el simulador tienes el estrés mental, definitivamente. Pero el estrés físico no lo tienes igual como lo tienes en la realidad y esa es una variable tan importante como todo lo demás que pues es importante como piloto en la realidad", comenta.
A pesar que las exigencias de una carrera real son mucho mayores que en una virtual, Gutiérrez reconoce que lo que sí es real en simracing son las emociones, incluso más intensas que en un circuito.
"Probablemente me pongo más nervioso en las carreras virtuales que en las reales. Y todavía no te puedo explicar por qué, pero el sentimiento es igualito, la adrenalina es igualita y también la competencia. Empezando por ahí te imaginarás la cantidad de horas que nos pasamos compitiendo por el simple hecho de querer vivir y sentir eso", añade.
No llegarán a igualar las sensaciones reales que viven en coches con cientos de caballos a sus espaldas o delante de ellos, pero parece claro que las carreras virtuales compensan en cierta manera la falta de actividad en pista y les dan a los pilotos objetivos que perseguir mientras sueñan con volver al trabajo.
Información adicional de Diego Mejía
Si aún no sabéis con qué entreteneros en casa...
(Pulsa Versión Completa abajo del todo si no ves las fotos; sigue leyendo después de la galería)
Forma parte de la comunidad Motorsport
Únete a la conversaciónComparte o guarda este artículo
Suscríbete y accede a Motorsport.com con tu ad-blocker.
Desde la Fórmula 1 hasta MotoGP, informamos directamente desde el paddock porque amamos nuestro deporte, igual que tú. Para poder seguir ofreciendo nuestro periodismo experto, nuestro sitio web utiliza publicidad. Aún así, queremos darte la oportunidad de disfrutar de un sitio web sin publicidad y seguir utilizando tu bloqueador de anuncios.
Mejores comentarios