Como cuando echas de menos antes de que se hayan ido. Así se ha sentido el DTM desde que Mercedes anunció, en 2017, que dejarían el campeonato alemán para centrar esfuerzos en la Fórmula E.
Ese día ha llegado, y aunque Mercedes deja el DTM con el título de Gary Paffett, sus rivales no respiran tranquilos. Al revés, ya están añorándoles. Antes de la cita final en la que Rast se jugaba con el inglés ser campeón, Audi publicaba un emocionante vídeo en el que lanzan un mensaje sencillo a los de las flechas de plata: os echaremos de menos.
Mira el bonito vídeo (debajo dejamos la transcripción)
"Querida Mercedes. Te vas y debemos admitir que te echaremos de menos.
Desde luego que echaremos de menos las luchas, los vuelos, los conflictos, los incidentes, ese par de curvas, giros favoritos para nosotros. Y las piruetas.
La emoción, la rivalidad, la celebración y, ¿qué hemos aprendido de todo esto? Que la leyenda no es sólo un piloto que gana carreras, que un equipo no es sólo un grupo de gente. Que la rivalidad nace de la pasión y que el DTM no son sólo carreras.
Juntos hicimos mucho más que eso.
Aguantamos la respiración, perdimos la orientación, dejamos la pista de las maneras más espectaculares y, gracias a Dios, seguimos vivos, cuando sólo la mano del hombre pudo pararnos, cuando sólo queríamos que la tierra nos tragase, cuando el clima se volvió loco de día y de noche.
A veces no os llegamos a entender, pero nosotros también cometimos errores. Perdón por aquello.
Nos amamos y nos odiamos, pero siempre nos respetamos el uno al otro. De alguna manera nos convertimos en una familia.
Pero ahora la historia ha llegado al final. Y, sí. Nos gustaría dejaros ganar esta. Pero de esta otra manera, seamos sinceros, es más emocionante. Esperemos que nos veamos de nuevo otra vez en la pista, en el paddock, en el podio.
Nos vemos, Mercedes".
Galería: la historia de Mercedes en el DTM
La historia de Mercedes Benz se remonta al origen del DTM en 1984. En aquella época, algunos pilotos se apuntaron al campeonato de manera privada sin demasiado éxito.
En 1986 Mercedes-Benz decide volver al mundo de la competición tras más de 30 años alejados. Lo hacen apoyando dos equipos, Kessel y RSM Marko (de Helmut Marko). Volker Weidler consigue la primera victoria y acaba subcampeón la temporada.
En 1988 Mercedes vuelve de manera oficial a la competición de la mano de AMG. Dany Snobeck consiguió la primera victoria de la temporada.
En las filas de Mercedes contaron con pilotos míticos como el venezolano Johnny Cecotto, que estuvo cerca de lograr los títulos de 1990 y 1991.
Mercedes siguió evolucionando durante los siguientes años en busca de su primer título en el campeonato.
Los de Stuttgart contaron en sus filas en 1990 con el campeón de 1988, Kurt Thiim. Sin embargo, el modelo de ese año carecía de fiabilidad y le impidió proclamarse campeón.
El primer título de la marca llegaría en 1991. En este caso el de constructores. Por aquel entonces ya estaba en su filas quien se convertiría en una leyenda del certamen: Bernd Schneider.
El campeonato crecía en popularidad y un todavía desconocido Michael Schumacher también se animaba a probar el vehículo del fabricante alemán.
El primer título de pilotos lo conseguiría en 1992 Klaus Ludwig. La marca hizo su primer doblete puesto que también se alzaron campeones de marcas.
En 1994 la marca dejaba atrás el veterano 190 E y ponía en pista el nuevo clase C. Tras un 1993 en blanco, la marca repitió ambos campeonatos.
En 1995 comenzaría la leyenda de 'Mr. DTM': Bernd Schneider lograría el primero de sus seis títulos.
El campeonato no paró de crecer. Los costes cada vez eran más altos debido al elevado grado de desarrollo tecnológico, sólo superado por la Fórmula 1. El campeonato entró en colapso en 1996 y no se volvió a celebrar hasta el año 2000.
Para su vuelta, Mercedes puso todo sobre el asfalto. Arrasaron los dos primeros años ganando los títulos de pilotos y fabricantes.
La marca dominó a placer tras la vuelta con diferentes pilotos.
Cómo no, los títulos de pilotos fueron a manos de Schneider. El alemán forjaba carrera a carrera su leyenda.
Tal fue el atractivo de estos años que leyendas de la Fórmula 1 se sumaban al campeonato, como Jean Alesi, que logró cinco triunfos.
Ni siquiera el más laureado de la historia, Schneider, se ha librado de algún fuerte accidente, como este de 2005.
Paffett era capaz de superar a su compañero de marca, Schneider, para proclamarse campeón en 2005, primer británico en la historia.
Tras su retirada de la Fórmula 1, Mika Hakkinen también quiso probar suerte en el DTM, por su puesto, con Mercedes.
2006 sería el año del último título de Schneider, el sexto. Por ahora nadie ha podido acercarse a sus cifras.
También el hermano de Michael Schumacher disputó varias temporadas del DTM tras dejar la F1, aunque con poca fortuna.
Tras el último título de Schneider, en 2010 fue Di Resta el encargado de devolverle el entorchado de pilotos a los de Stuttgart, antes de su paso a la F1.
También ha habido varios españoles en las filas de Mercedes, como un joven Roberto Merhi, que llegó a subir al podio en Hockenheim.
Algunas decoraciones de Mercedes ya son historia del automovilismo, como esta de BWT que lució Auer en 2013 y que ahora patrocina a Force India en F1.
Wehrlein ha sido el último campeón hasta ahora de Mercedes. El joven alemán se impuso en 2015 y le sirvió de pasaporte para dar el salto a la Fórmula 1.
Otro de los españoles destacados en el campeonato con Mercedes ha sido Juncadella.
Una de las imágenes de 2017: el fortísimo accidente entre Paffett (Mercedes) y Rockenfeller (Audi).
El pasado domingo, era Maro Engel quien se imponía en Moscú al volante de un Mercedes. El último triunfo hasta ahora de la marca de la estrella
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