La organización del Dakar acepta las críticas de Loeb y Elena

Arequipa (Perú).- La etapa 3 de este Dakar de dunas y 100% peruano dañó duramente el orgullo de Daniel Elena, el copiloto de Sebastien Loeb, nueve veces campeón del mundo de rallies con el alsaciano de 2004 a 2012. Pero la organización del rally ha reconocido que había un fallo en aquella viñeta del kilómetro 177. No obstante, no devolverá tiempo a nadie.

Daniel Elena criticó duramente a los organizadores en redes sociales, y en declaraciones a Motorsport.com, por lo que considera un roadbook impreciso y un mal trabajo de los vehículos que hacen el reconocimiento de cada etapa días antes.

“En el roadbook de la etapa 3, para mí, hay un gran problema donde nos hemos perdido muchos. No es una disculpa. La organización dice que el rodabook es perfecto… eso es una tontería. Todo el mundo, las motos, los coches, todos hemos tenido el mismo problema en el mismo punto. Yo quiero que reconozcan que es problema suyo”, aseguró el copiloto francés en el vivac de Arequipa.

Xavi Colomé, responsable del roadbook del Dakar, aceptó las críticas y reconoció que en una de las viñetas del libro de ruta de la etapa 3, había un fallo que podia llevar a confusión.

“La verdad es que hemos recibido críticas del roadbook, sobre todo de la etapa 3, donde Loeb-Elena y otros participantes se perdieron. En ese punto concreto, es cierto que hubo una imprecisión de roadbook. Concretamente en el km 177, aparece una torre eléctrica muy evidente que es una referencia muy buena que muchos competidores usan para recalar el kilometraje y seguir adelante. Esta torre eléctrica no tendría que estar en este punto, sino que tendría que estar en el anterior, en el 175,01”, comentó Colomé.

“Esto fue lo que causó la confusión y que fuesen mal de kilometraje estos pilotos que tomaron la referencia para seguir el camino. Lo que son las distancias entre puntos de control (WP) y el recorrido, los caminos, está correcto. Pero lo que confunde es la posición de esta torre eléctrica”.

“El análisis lo han hecho los comisarios deportivos y han decidido que esta imprecisión es tanto para ellos como para todos los pilotos, por lo que no se devolverán tiempos. Y repito, los que tomaron la torre como referencia se perdieron y los que no la tomaron como referencia, siguieron el camino sin problemas”, confirmó.

“Es normal, son gente que se juegan el Dakar, que se juegan mucho y naturalmente a nadie le gusta perderse 15, 30 o incluso dos minutos”.

Los pilotos se quejan principalmente de los WPC, que se abren a 300 metros, pero que nunca te llevan al centro del punto de control, por lo que puedes desviarte notablemente de la ruta. Algunos llegan a valorar que los libros de ruta están diseñados para ir a velocidades mucho más bajas de las llevan los pilotos de arriba y que muchos peligros no están bien marcados.

Controles aleatorios de roadbook

Colomé ha dejado claro que están recogiendo los libros de ruta al final de cada especial, tras y cómo prometieron, para revisar que ningún piloto añade información extra a la dada por la organización.

“Los roadbook los estamos retirando en las llegadas de las especiales en todas las categorías, los llevamos al PCO y entre los comisarios deportivos y el equipo de recorrido los analizamos uno por uno para ver si lleva alguna información que no sea la proporcionada por nosotros o tienen alguna anomalía”, comenta.

El catalán deja claro que los pilotos han aprendido la lección: “Han aprendido rápidamente. De momento no hemos visto nada ilegal. Todos tienen notas, pero todas son acordes al reglamento”.

Y advierte lo que está por llegar: “Las etapas van a ser más duras. Primero de todo, porque ya van cansados, las máquinas desgastadas y los recorridos van a ser más duros”.

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