Coma: "Hemos demostrado lo competitivos que podemos ser"

El reto de Marc Coma, cinco veces ganador del Dakar en motos, en la 42ª edición del rally más duro del mundo no era nada sencillo. El catalán ha cargado en sus hombros una enorme responsabilidad. No solo la que cualquier aventura con Fernando Alonso de por medio tiene, sino también el toque extra que el equipo Toyota Gazoo Racing introdujo.

Desde los primeros entrenamientos entre las dunas, que arrancaron el mes de agosto en Namibia, la estructura de raids de la marca japonesa confió en Coma para que guiara a Alonso a través de la arena blanda, para que hiciera de ángel de la guardia en todo momento del bicampeón del mundo de Fórmula 1.

Cinco meses después, Coma puede estar contento con la labor realizada y con la incalculable ayuda que ha brindado al asturiano en su primera aventura en el desierto. El español aseguró, tras acabar su 13º Dakar, el primero compitiendo desde 2015, estar satisfecho.

"Creo que tenemos que estar muy contentos, porque terminar un Dakar nunca es fácil. Tuvimos problemas dos días, pero creo que nadie termina un Dakar sin problemas. Sí es cierto que el de la etapa 2 fue un pequeño error que pagamos muy caro, pero es la ley de esta carrera. A partir de ahí, más rápidos, más cómodos, más sólidos, entendiendo cada vez más la carrera, el desierto... el trabajo intenso de estos últimos meses aquí se ha visto a nivel mecánico, de navegación e incluso de Fer a nivel de velocidad", comentó.

"Toda esta preparación se ha demostrado. Si miramos al mes de agosto el nivel que teníamos y dónde estamos ahora, ha habido un salto cualitativo impresionante. Estoy orgulloso; he intentado transmitirle toda mi experiencia, mi manera de entender la carrera, la lectura del terreno y él lo ha absorbido rapidísimo. Estoy contento, era la función que tenía en este proyecto, me alegra que Fer haya aprovechado esto de mí para ser competitivos, llegar hasta el final y tener una velocidad prácticamente como los de delante".

Los españoles se colaron en el top 10 en ocho de las 12 etapas, llegando a ser cuartos en dos y segundos en una. Los números son de sobresaliente, a pesar de que un accidente en la segunda jornada y un vuelco en los primeros kilómetros de la 10ª les dejasen 13º en la general final del rally.

"Fue una experiencia positiva, estoy contento de estar en la línea de meta, sobre todo en mi primera participación como copiloto. Para mí ha sido una función completamente distinta a lo que estaba acostumbrado. Conocía el Dakar como piloto de moto y como director deportivo, pero como copiloto no y en Arabia Saudí tampoco", respondió el catalán a Motorsport.com.

"He disfrutado, siempre tienes una exigencia, una presión, una responsabilidad obvia, que siempre hace que sea un disfrute controlado. Pero terminar una Dakar demostrando lo rápidos que podemos ser, lo competitivos que hemos sido... hemos tenido días muy positivos y tenemos que estar orgullosos".

Cuando se le pregunta si su primera experiencia como copiloto le da ganas de repetir, Coma se muestra prudente y asegura que analizará su futuro en las próximas semanas.

"Acabamos de llegar, es momento de disfrutarlo. Teníamos dudas de cómo nos íbamos a encontrar, qué iba a pasar y demás. Después ya pensaremos en un futuro, no es momento de hacernos esta pregunta", respondió.

Coma ha vuelto a saborear el desierto del Dakar, aunque al otro lado del mundo, y a un dakariano como él, eso le ha tenido que remover algo por dentro.