Miguel Molina, en las Blancpain Endurance con SMP Racing

Miguel Molina cambia de rumbo su carrera deportiva después de quedarse fuera de la alineación de seis pilotos de Audi para el DTM 2017. El piloto catalán, que probó con Ferrari a comienzos de febrero para tratar de ocupar el puesto vacante de Gianmaria Bruni en el WEC,  disputará las Blancpain Endurance esta temporada dentro del equipo SMP Racing a los mandos de un Ferrari 488 GT3.

Molina compartirá volante en el #54 con Davide Rigon y con Viktor Shaitar, campeón del WEC en GTE Am, en 2015 con quienes ya ha probado estos días en Paul Ricard.

"Estuvimos probando esta semana en los test [en Paul Ricard] y parece que fue todo muy bien. Contento de poder ayudar de esta manera al equipo. Es una categoría nueva para mí, pero tengo muchas ganas", reconoce Molina Motorsport.com. 

"Ha sido todo muy rápido, la verdad. Todo tiene un poco de relación [con las pruebas de Ferrari en Febrero], pero este es un coche diferente y es bueno tener a los compañeros que tengo, tanto a Davide como a Viktor. Davide tiene muchísima experiencia en este tipo de carreras y esperemos apostar al máximo".

Sobre sus objetivos para esta primera temporada completa en las Blancpain Endurance, Molina apunta alto: "Yo creo que el objetivo es igual para todos. Tenemos un buen equipo e intentaremos estar delante en las máximas pruebas posibles y por mi parte, adaptarme lo antes posible a esta categoría, a este nuevo formato de carrera. La primera toma de contacto esta semana ha sido muy buena. Con muchos coches en pista me he sentido muy bien a nivel de tráfico y demás, y creo que es eso lo que más tengo que trabajar este año".

Después de pasar los últimos siete años como piloto oficial de Audi en el DTM, Molina cambia de aires –como también ha hecho Dani Juncadella, que correrá con AKKA Racing las Blancpain Sprint y Endurance– y deja claro que los GT no tienen nada que ver con los coches del campeonato alemán de turismos.

"El coche de DTM no tiene nada que ver con un GT. Tuve el año pasado la oportunidad de hacer dos carreras con el R8 de Audi y este es bastante diferente. Este coche [el Ferrari] es más neutral, más fácil de conducir y llevar un Ferrari y escuchar su motor siempre es bonito", apunta el piloto de Girona, que ya compitió en las Blancpain en la cita de Nurburgring de 2015 con el equipo francés Sainteloc. 

Sobre la diferencia entre el Ferrari que probó a comienzos de febrero en Fiorano y este apunta: "La diferencia entre el GTE y el GT3 son los neumáticos, la aerodinámica... varias cosas por reglamento. La base es la misma, pero lo que más se nota son los neumáticos que allí eran Michelin y aquí son Pirelli, que son muy distintos".

"Seguramente me cueste adaptarme en la primera carrera para volver al ritmo, pero me han ido muy bien estos dos días en Paul Ricard para ver todo, trabajar con los compañeros y el equipo y eso ya es un avance".