Tres de tres. Clasificación tras clasificación, Red Bull sigue al frente con su tercera pole position consecutiva de la temporada 2023 de Fórmula 1, una clara supremacía que esta vez ha estado más ajustada, con solo dos décimas y media de diferencia respecto al Mercedes de George Russell.

El británico fue capaz de meterse en la lucha de los sábados entre los de Milton Keynes y Ferrari, aunque ya es habitual ver ahí a Fernando Alonso, que fue cuarto superando a los del Cavallino Rampante en un asfalto seco pese a la previsión meteorológica.

Ese resultado, con Lewis Hamilton tercero, deja la puerta abierta a alguna sorpresa para la carrera, no tanto en el que será el ganador, previsiblemente Max Verstappen, sino por la batalla por el podio en el circuito de Albert Park.

Carlos Sainz paga tener los neumáticos fríos al inicio de la vuelta

Si con Charles Leclerc la decisión fue de no dar una vuelta adicional de preparación por el temor a la lluvia, los problemas del español fueron otros. Aunque la desventaja respecto a Mercedes es importante, tres décimas, el quinto puesto final no debe engañar, porque el madrileño podría haber estado en la pelea, al menos, por la segunda fila de la parrilla.

Todo se decidió en el último intento, cuando, a pesar de la posible llegada del agua, los de Maranello optaron por repartir las estrategias entre sus pilotos. A Carlos Sainz le aconsejaron un giro de preparación extra antes de su intento, mientras que al monegasco le recomendaron ir a por todas desde el inicio.

No obstante, comunicaron por radio que había un cambio de planes cuando el español había intentado el rebufo con su compañero en la parte final del primer sector. El problema surgió después, cuando el ingeniero de Sainz le comentó que por detrás venían en vuelta rápida otros como Fernando Alonso, aunque el ovetense seguía el mismo plan que el de Ferrari.

Fue una situación que creó confusión, obligando a Sainz a esperar fuera de la trayectoria para que pasara su compatriota. Eso, combinado con el hecho de que en el tercer sector debía dejar margen con el de Aston Martin, hizo que sus gomas se enfriaran para la primera sección del giro.

Para hacernos una idea, en el sector en el que el madrileño dejó pasar a Leclerc, fue ocho segundos más lento que el ritmo de su vuelta de preparación y nueve en la siguiente parte del circuito. Eso se puede apreciar también comparando sus dos intentos de la Q3, con velocidades mucho más altas en el inicio de la ronda, y señaló que esas dos décimas que perdió le podrían haber permitido pelear con los Mercedes.

Telemetría de la clasificación del GP de Australia 2023 de F1: los intentos de Sainz

Red Bull, competitivo en toda la vuelta con una estrategia diferente

Un aspecto muy diferente en Red Bull respecto a los demás fue su forma de calentar los neumáticos, con algunos dando dos vueltas de preparación antes de su intento. Sin embargo, ya desde el viernes, los austriacos se mostraron capaces de marcar su tiempo al instante pese a un asfalto resbaladizo y con poco agarre.

"Fue muy difícil hacer trabajar los neumáticos en la primera curva y conseguir una sensación cómoda. Ha sido un poco la historia de todo el fin de semana, y no creo que hubiera importado si hubiéramos ido tan rápido en la FP1 y FP2, es solo que es muy complicado con el nuevo asfalto", aseguró un Max Verstappen que hizo la pole position en Melbourne.

El trazado estaba muy difícil con unas bajas temperaturas, de cerca de 21ºC en el inicio de la clasificación, y la lluvia que cayó hizo que se fuera esa goma acumulada durante los entrenamientos. Eso complicó poner las ruedas en la ventana de funcionamiento perfecta, y generó un riesgo de desgastar demasiado las delanteras nada más salir a la pista.

Lo que hay que destacar es cómo Verstappen supo gestionarlo a la perfección, manteniendo muy buenos tiempos en el primer sector, pero sin pasarse, y después teniendo suficiente goma como para marcar el mejor crono. Mirando la telemetría se ve que el neerlandés pasa por la primera curva unos 7 km/h más veloz que George Russell, 17 si tomamos a Sainz como referencia con los neumáticos fríos, además de que perdió un poco el control del SF-23.

Es posible pensar que el de Red Bull se contuvo en el primer sector, tanto que el Mercedes W14 fue muy competitivo en la siguiente zona del circuito, justo donde Ferrari sufrió más en ambos intentos con sus pilotos. De hecho, los de Maranello se vieron obligados a ir al límite para preparar el cambio de dirección en la rápida variante, mientras que Verstappen iba más veloz sin perder en la salida de la curva.

Telemetría de la clasificación del GP de Australia 2023 de F1: Verstappen-Sainz

En comparación con el viernes, las estadísticas en cuanto a las rectas han cambiado. Con cuatro zonas de DRS en las que explotar el rendimiento de los coches, el bicampeón del mundo optó por una puesta a punto más cargada, mientras que Ferrari subió la potencia, reduciendo la diferencia vista en los libres.

De hecho, la diferencia no era por la velocidad punta en sí, sino por la peor salida de la curva, y eso pasó en la 3, aunque también por la entrada en los giros, como sucedió en la 11. Un punto en el que los italianos sufrían en el pasado ya parece haberse resulto, aunque deben juntar todo para hacer que el SF-23 tampoco pierda en el paso por curva, como se evidencia si se compara con el W14.

Telemetría de la clasificación del GP de Australia 2023 de F1: Russell-Sainz

Sin embargo, los del Cavallino Rampante rindieron muy bien en frenada, como en la de la 11, en donde fueron mejor que Red Bull y Mercedes. Eso se muestra con el tiempo global del sector, puesto que a pesar de perder en la chicane rápida, lograron unas marcas similares.

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