La muerte de Senna llevó a Schumacher a Ferrari

El paso Michael Schumacher de Benetton a Ferrari en 1996 probablemente nunca hubiera sucedido sin la muerte de Ayrton Senna el 1 de mayo de 1994 en San Marino.

Ahora, el ex presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, reveló en una entrevista que la prioridad era fichar a Ayrton Senna, unido al deseo del sudamericano de dejar Williams tras las complicaciones que encontró ese año desde la pretemporada.

En 1996 el fichaje habría sido posible, porque Senna habría terminado ahí su contrato, pero tras su accidente en Ímola, Ferrari tuvo que buscar en otro lado, y fichó al bicampeón del mundo Michael Schumacher.

Sin embargo, si Senna hubiera vivido, ¿podría haber sido compañero del Kaiser en el Cavallino Rampante? Montezemolo da la respuesta.

“Juntar a Schumacher y Senna habría significado un disparado en el pie", dijo el italiano a Sky Sport 24. "Eso no hubiera funcionado, porque si tienes dos superestrellas en el mismo equipo, no ganas", señaló Di Montezemolo y añade que, aunque ambos habrían dado un gran espectáculo, “no habría sido bueno para Ferrari".

Además de Schumacher, la Scuderia fichó al irlandés Eddie Irvine como piloto número 2, que salvo por su extraña oportunidad por luchar por el título de 1999, cuando Schumacher se rompió una pierna en un terrible accidente en Silverstone, se conformó con ser el segundo piloto. Su sucesor Rubens Barrichello también ocupó ese rol bajo el mandato de Luca di Montezemolo, aunque el brasileño se veía a sí mismo como un "1b" y no como un "2".

Con esa división de roles, Ferrari ganó cinco títulos consecutivos entre 2000 a 2004, después de pasado 21 años sin campeonatos de pilotos. Schumacher también tuvo épocas difíciles al comienzo de su unión con los del Cavallino.

El ex presidente recuerda que había voces críticas en Italia en el momento en el que se anunció la firma del piloto alemán. "Había cierto escepticismo, pero estaba convencido de mi elección porque era el momento adecuado".

Schumacher podría haber llegado dos años antes, enfatiza, pero eso habría sido demasiado pronto. "No teníamos el coche para ganar. Michael vino después de una larga reestructuración de todo el equipo. Llegó a nuestro equipo cuando el piloto podía marcar la diferencia".

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