Mercedes insiste en que tiene más problemas además del porpoising

Tras el buen fin de semana en el Gran Premio de España en el circuito de Montmeló, Mercedes parecía haber recuperado parte de su estado de forma, incluso estuvieron cerca de luchar por la victoria con George Russell, y en Canadá consiguieron sumar un nuevo podio con Lewis Hamilton.

En la cita en Montreal, las flechas de plata cosecharon un total de 27 puntos que sirvieron para escaparse de manera definitiva en la clasificación de constructores de la zona media, pero más que el resultado, lo que llenó de satisfacción al garaje alemán fueron las sensaciones de sus dos pilotos con las tandas largas, sobre todo con el neumático duro.

Con esta goma, Hamilton y Russell se acercaron a los más rápidos, los que quedaron en primera y segunda posición, Max Verstappen y Carlos Sainz. Sin embargo, a pesar de que cada vez están más cerca, Mercedes es consciente de que están en tierra de nadie, como aseguró el máximo responsable del equipo, Toto Wolff, cuando acabó la carrera.

George Russell, poco después de cruzar la línea de meta en Canadá, señaló que aún estás muy lejos de alcanzar los objetivos marcados al principio de la temporada. El porpoising se ha reducido en el W13, pero siguen existiendo muchos otros problemas, como la rigidez del monoplaza y la falta de carga aerodinámica general, lo que afecta considerablemente al rendimiento de los alemanes.

"Con el coche, cuando resolvemos un contratiempo, inmediatamente aparece otro de distinta naturaleza. El efecto rebote se ha solucionado, pero luego, cuando bajamos la altura del monoplaza, golpeamos el suelo de una forma muy agresiva", indicó el inglés. "Por el momento, no parece que tengamos un punto fuerte".

"Hemos competido con el coche más alto y más bajo, pero el rendimiento no ha mejorado ni empeorado. La rigidez del fondo sigue siendo la misma, y cuando corrimos con el monoplaza elevado, vimos un tipo de efecto, mientras que cuando lo bajamos, observamos otro", explicó George Russell. "Intentar ajustar el coche varias veces no es algo fácil por esta razón".

"El coche es muy rígido en general", continuó el británico. "El porpoising no era tan malo en Canadá, pero seguíamos golpeando el asfalto como en Bakú, de forma menos extrema, solo por las características del circuito y la velocidad, pero los problemas están lejos de que se resuelvan".

El propio Toto Wolff ha citado a la "golondrina en primavera" precisamente para comparar el momento que el equipo está pasando. El W13, aunque sufre menos rebotes, sigue acusando este movimiento, pero insiste en que son otras razones las que limitan el rendimiento de Mercedes.

"¿Nuestra actuación en Canadá? Una golondrina no hace la primavera, y ya vimos esa golondrina en Barcelona, pero debió volar a otro lugar", expresó el austriaco. "Debemos tener cuidado, el viernes no tuvimos buen ritmo, el sábado, bajo la lluvia, mejoramos, y en la carrera fuimos mejores".

"A veces estábamos entre los coches más rápidos, y en el segundo stint, tanto Lewis [Hamilton] como George [Russell] fueron al ritmo de los líderes. Es motivador ver eso, el trabajo que estamos haciendo es para volver a competir con los primeros", reconoció Wolff.

"Por lo que hemos podido ver, el rebote de los monoplazas se ha reducido considerablemente, y creo que los pilotos se han adaptado", dijo el jefe de Mercedes. "Los coches actuales son rígidos, solo hay que ver, por ejemplo, a los Alpine cómo salen de los bordillos, tienen un gran rebote, y eso es de lo que se quejan los pilotos, así que tenemos que trabajar para entender cómo reducirlo".

La rigidez preocupa a las flechas de plata, pero no solo es eso. Como indicó Russell, cuando se resuelve un problema en el W13, aparece otro inmediatamente después, y la carga aerodinámica es uno de ellos.

"Creo que tendremos que intentar mejorar la carga en el coche, más flujo del aire, y hacerlo con un monoplaza que no sea tan bajo como habíamos previsto. La dirección es clara, se puede ver que los coches están subiendo la altura, y aquí es donde debemos encontrar el rendimiento", sentenció Wolff.