Vídeo y galería: el duelo de Verstappen y Ricciardo en fútbol

"Donde fueres, haz lo que vieres", dice el refrán, y pocos como Red Bull lo cumplen tan a menudo. El equipo de las bebidas energéticas, como tienen por costumbre antes de cada gran premio, llegó a Brasil y puso a sus pilotos a seguir una tradición local. En este caso, a jugar al deporte rey, en el que la selección brasileña es la más laureada.

Sin embargo, no fue a fútbol 11, sino a fútbol sala en lo que se midieron Daniel Ricciardo y Max Verstappen antes del GP de Brasil.

En las canchas de Vila Madalena, Sao Paulo, se unieron a jugadores locales para poner a prueba su habilidad con el balón, tanto al hacer virguerías y malabares como en un partido tres contra tres.

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Ricciardo admitió que se le da mejor conducir que regatear y meter goles, aunque se mostraba contento con su rendimiento. "Creo que lo hice bien, aprendí algunas cosas", dijo el australiano. "Nos enseñaron cosas de técnica y ejercicios de aprendizaje. Se trata de un deporte más técnico que de potencia".

Verstappen se apresuró a decir quién había vencido: "Sí, mi equipo ganó".

"El tema es que Daniel realmente no entiende el juego. Le gusta llevar el balón con las manos, es algo australiano...", decía riéndose.

Su compañero contraatacó, admitiendo la superioridad del holandés: "Creo que tengo más habilidad que Max, pero él tiene un buen disparo que le hace marcar goles. Y corre más, porque es joven y tiene más energía, así que tenía ventaja".

"Practicamos algunas habilidades", siguió Verstappen. "Fue bueno ver cómo se hace. Lo hago bien en el FIFA, pero estos jugadores son más hábiles que yo. Aunque, cuando empieza el partido, recurres a viejos hábitos y todo se trata de correr y tratar de meter gol".

Tras la de Interlagos, solo les queda una carrera juntos como compañeros, la de Abu Dhabi. Seguro que Max echará de menos a 'Dan' en estos eventos con su equipo.