Hamilton coronado, ¿oportunidad para Vettel?

Los dos títulos anteriores de Lewis Hamilton, en 2015 y 2017, han tenido en común que una vez matemáticamente asegurados, en las siguientes carreras el ahora pentacampeón del mundo, no consiguió ni poles ni victorias, generando el interrogante en torno a si una vez la presión disminuye, el británico baja la guardia.

En 2015 Hamilton aseguró el título en Austin tras un error de su entonces compañero Nico Rosberg y las tres carreras siguientes fueron dominadas el alemán, quien cogió impulso hacia lo que sería su temporada de campeón y a la postre la última de su carrera en la Fórmula 1.

Rosberg consiguió todas las poles restantes y también las victorias en México, Brasil y Abu Dhabi. Aunque Hamilton regresaría fuerte en su defensa del título en 2016, consiguiendo la pole en Australia, Rosberg ganó las primeras cuatro carreras de ese año, sentando las bases para desafiar a Hamilton a lo largo de la temporada.

Después del difícil Gran Premio de Singapur de ese año para Mercedes, la peor carrera del equipo en términos competitivos en 2015, Hamilton no volvió a conseguir una pole, algo que luego en Brasil reconció que tuvo que ver con su empatía a una vuelta con el W06 de esa temporada.

Sin embargo, en 2017 ocurrió algo similar al final de 2015. Tras lograr el título en México, Hamilton cometió un error poco característico en él, chocando en su primera vuelta de clasificación en Interlagos. Esto le obligó a salir último y lo marginó de la lucha por la victoria, que quedaría en manos de Sebastian Vettel seguido por el poleman Valtteri Bottas.

En Abu Dhabi dijo haber cogido el camino equivocado con la puesta a punto, anticipando una pista con mas agarre para la clasificación nocturna y el resultado fue que Bottas le arrebató la pole, posición que luego conservó en la salida el domingo, manteniendo a Hamilton en sus retrovisores el resto de la carrera.

Este año, salvo el Gran Premio de Austria donde se produjo el doble abandono de Mercedes por un fallo hidráulico para Bottas y por una pérdida de presión de combustible para Hamilton, México marcó la primera vez en 2018 en la que no hubo ningún piloto de Mercedes en el podio, incluso con ambos cruzando meta.

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Aunque los problemas con el graining en los Pirelli no necesariamente se repetirán en Interlagos ó en Abu Dhabi, Mercedes viene de dos carreras en las que sus rivales han conseguido superarles, con Ferrari ganando en Austin con Raikkonen y tanto Red Bull como Ferrari superándoles el domingo en el Autódromo Hermanos Rodríguez.

Si bien este bajón puede ser circunstancial, al mismo tiempo plantea un desafío adicional para Hamilton, quien ya no tiene nada que perder y puede correr prácticamente sin ataduras. Pero a pesar de que el mundial de constructores está aún por definirse a favor de Mercedes por quinto año consecutivo, está también por verse si de lo de Hamilton en 2015 y 2017 se repite.

Esta recaída de Mercedes puede ser la oportunidad para que Ferrari, y sobre todo Sebastian Vettel, logren retomar el impulso perdido para irse al invierno sabiendo que fueron capaces de recuperar el rumbo y que lo que he denominado antes como la "escalada ferrarista", continúe ganando fuerza en 2019.

Este 2018 ha marcado la cuarta temporada de Sebastian Vettel junto a Ferrari. A Michael Schumacher le llevó cinco campañas llegar a ser campeón vestido de rojo. Fernando Alonso completó cinco y se despidió de Maranello sin el anhelado tercer campeonato.

La llegada de Charles Leclerc el próximo año a la Scuderia genera interrogantes en torno a cuál será la dinámica de sus pilotos el próximo año, en especial después de que la falta de una política clara como la del pasado les costara este año, como ocurrió en Monza por ejemplo. En los Grandes Premios de Brasil y Abu Dhabi, Vettel tendrá la oportunidad de intentar dejar sentadas las pautas.

Entre los pilotos actuales, él es quien mas victorias ha conseguido en los circuitos de Interlagos y Yas Marina, tres en cada una, además del buen recuerdo de haber ganado en cada pista un título (2012, 2010 respectivamente). El tetracampeón podría ahogar la pena de México con el champagne en lo mas alto del podio en Brasil y Abu Dhabi, con lo cual podría irse hacia 2019 con su índice derecho apuntando hacia arriba.