KTM aterriza en MotoGP nadando contra corriente

Tras el regreso en los últimos años de marcas míticas a MotoGP, como Suzuki y Aprilia, en 2017 la categoría reina del motociclismo vivirá el debut de una nueva marca que nunca antes había competido en la primera división: KTM.

El fabricante austríaco contará con una alineación de pilotos jóvenes pero expertos, como el británico Bradley Smith y el español Pol Espargaró, ambos con enormes ganas de demostrar sus cualidades.

KTM ha triunfado en las competiciones donde se ha implicado, sobre todo a nivel off road, pero también en las categorías de formación del mundial, como Moto3 y Moto2.

La RC16, sin embargo, necesitará de un periodo de adaptación y evolución, sobre todo al presentar soluciones y novedades nunca vistas en MotoGP.

“Estamos usando diferentes horquillas delanteras que nadie está usando y no sé si eso será un problema o una ventaja, ciertamente es diferente. El chasis tubular es lo más preocupante, no porque sea malo, sino porque es nuevo. Nadie lo ha probado. KTM los usa pero es realmente diferente a los que MotoGP está acostumbrado”, argumentaba Espargaró tras haber probado la nueva moto en los test de pretemporada de Valencia.

“KTM tiene grandes ideas. Allá donde van, ganan. Así que confían en su potencial aunque es un proyecto muy joven. Necesitamos experiencia. Pero soy bastante positivo”.

Empezar de cero

El ya ex piloto de Yamaha, tiene claro que el camino por recorrer el largo.

“Empezar en una fábrica como KTM es hacerlo desde cero, no es lo mismo que empezar en otra fábrica que lleva varios años en MotoGP. Toda la moto es nueva, eso implica mecánicos nuevos y demás. Los pasos son muy grandes, el proyecto es muy ilusionante pero nos falta mucho rodaje”.

Pol espera con ganas ya los test de Malasia, a finales de enero, para seguir adaptándose a la nueva moto.

“Nunca había trabajado con un chasis tubular, ni nunca llevé una moto que no fuera la M1, y al principio cuesta un poco entenderlo pero también tiene puntos a favor”.

“Hay que tener un poco de calma, sobre todo al principio de temporada. Acabamos de empezar. Hay muchas ganas e ilusión, pero necesitamos trabajo. El futuro puede ser brillante, pero de momento hay que trabajar”, advertía el piloto de Granollers.

Espargaró no se quiere marcar metas en sus primeros pasos como piloto oficial de fábrica en KTM.

“En mi primer año en MotoGP terminé el sexto del mundial porque salía con los reglajes que me aconsejaba Yamaha”.

“No podemos empezar en Qatar pensando en lograr podios. Hay que intentar trabajar desde la base para ir mejorando la moto. Soy positivo, y creo que podemos mejorar la moto desde la primera carrera hasta la última. Puede que en el segundo año podamos pensar en el podio, pero difícilmente lo lograremos en el primero”, asegura el nuevo piloto de KTM.